Los nuevos parques eólicos vascos generarán casi 500 puestos de trabajo

Los parques eólicos de Azazeta y Labranza, que ya han obtenido las declaraciones de impacto ambiental positivas, generarán hasta 470 empleos en Euskadi. Según Aixeindar, la sociedad constituida por el Ente Vasco de la Energía e Iberdrola para dar impulso al desarrollo de energías renovables en Euskadi, estos proyectos “supondrán un espaldarazo definitivo a la apuesta de generación de energía verde en Euskadi para avanzar, así, en los objetivos de la Transición Energética”. Ubicados en Araba, estos parques eólicos sumarán una potencia instalada de 160 megavatios (MW) y representarán una inversión de 169 millones de euros y “contribuirán a la reactivación de la economía y el empleo local, ya que involucrarán hasta 470 profesionales”.

La primera de ambas infraestructuras proyectadas en territorio alavés, la de Labraza, podría ejecutarse a finales de 2024, mientras que se prevé que la segunda, la de Azazeta, pueda llevarse a cabo en 2025. Según subrayó Aixeindar, estas instalaciones renovables, de 40 MV de potencia cada una, se convierten así en las primeras instalaciones eólicas que “generarán energía 100% verde que se pondrán en marcha en Euskadi desde 2006”. Una vez operativos, los proyectos generarán energía limpia para 107.000 hogares y evitarán la emisión a la atmósfera de más de 50.000 toneladas de CO₂ al año.

El parque eólico de Labraza, situado en el municipio de Oion, prevé ocho aerogeneradores y va a tener una capacidad de generación de 40 MW. Por su parte, el parque eólico de Azaceta, con ocho generadores y una capacidad de generación de 40 MW, está situado en los municipios de Alegría-Dulantzi, Iruraiz Gauna, San Millán/Donemiliaga, Arraia Maeztu y Bernedo.

Instalación mixta

Aixeindar prevé un tercer proyecto, la construcción de la primera instalación mixta eólica y fotovoltaica de Euskadi, Laminoria, en el Real Valle de Laminoria/Laminoriako Erret Harana, que está a la espera de su correspondiente declaración de impacto ambiental. Este proyecto consta de un parque eólico de 40 MW y una planta fotovoltaica, también con 40 MW. Laminoria, además, contempla la regeneración de la cantera, “lo que pone en valor el compromiso de Aixeindar con la economía circular”.

“Los tres proyectos eólicos tienen resuelta la conexión de la línea de evacuación a subestaciones existentes, lo que contribuirá a minimizar el impacto ambiental”, detalló la sociedad, que explicó que los proyectos de Labraza y Azazeta “se sumarán a la capacidad eólica instalada en la actualidad en Euskadi, que es de 153 MW, distribuidos en cinco parques eólicos”.

La importancia de las energías renovables se está dejando notar este mes de enero, en el que el viento ha predominado parte de los días y ha provocado una importante caída en la factura de la luz. De hecho, se prevé que los clientes acogidos a la tarifa regulada paguen entre 50 y 60 euros en el primer mes de año, encaminándose así a ser el recibo más barato en los últimos dos años. Esta bajada en la factura de la luz se produce gracias a la mayor presencia de las renovables en el mix de generación. De hecho, el viento ha llegado incluso a generar más de la mitad de la energía producida en determinadas franjas horarias y se ha hundido la producción con gas.

Pero, además, la sociedad que gestiona los tres proyectos vascos se compromete a continuar trabajando “para incorporar propuestas de carácter social para los municipios y los ciudadanos cercanos a los proyectos de parques eólicos que está promoviendo”. Entre otras opciones está valorando la creación de comunidades energéticas, lo que posibilitaría una reducción del precio de la energía, y el crowdfunding mediante la participación de los ciudadanos como socios del proyecto, en una fórmula de cooperativismo eólico.