Los números de este Athletic evocan a aquel campeón de Liga de los 80

El de ayer en Vigo no resultó un partido brillante, pero tampoco estridente del Athletic, que necesitaba invertir la serie de resultados que le andaban persiguiendo en este comienzo de año tras un brillante final de 2024 y lo logró. A la cuarta fue la vencida. La practicidad le llevó en Balaídos a volver a sumar los tres puntos, y así festejar por todo lo alto los 200 partidos oficiales de Unai Simón. La guinda que faltó fue mantener la portería a cero, algo que únicamente impidió el impertinente resbalón de Adama Boiro que puso emoción a los últimos instantes del choque.

Pretendido por la flor y nata del continente, el meta de Murgia ha repetido por activa y por pasiva que no quiere moverse de su casa. En esa línea se muestra Dani Vivian, quien sumó su tercera diana del curso. El también alavés obtiene provecho de sus incursiones al ataque, y llamativa es esa estadística que le concede el honor de ser el jugador de la plantilla que más pases realiza. Y además de largo, con 859. Yuri Berchiche es el segundo con 581. El otro goleador de la tarde gallega, Álex Berenguer, es otro que merece comentario. No es de los titulares indiscutibles ni un goleador nato, pero su oportunismo le hace firmar dianas de gran importancia que el colectivo agradece.

El caso es que se hacía imperioso pegar un golpe de timón a las últimas tres actuaciones, especialmente a la desazonadora del jueves que provocó la salida del fetiche torneo copero en beneficio de Osasuna. La Supercopa, tampoco pudo ser esta temporada, pero las Ligas, por ahora, están siendo otra cosa. En la europea, con la final a jugarse en casa dentro de cuatro meses, el horizonte queda muy lejano pero nadie está exento de alcanzar tal hito. Y en la doméstica, la velocidad de crucero en calidad de invicto supera ya los once encuentros y se acerca, precisamente, a los cuatro meses.

Desde aquel 6 de octubre con los famosos tres penaltis fallados y la derrota a manos del Girona, siete triunfos y cuatro empates. Con 18 goles a favor y tan solo ocho recibidos en los cinco encuentros jugados en San Mamés y los otros seis a domicilio, se han sumado 25 de los últimos 33 puntos habidos en juego.

A siete puntos de lo más alto, y empatado con el FC Barcelona en la tercera posición, le ha conseguido recuperar a este en apenas ocho jornadas una barbaridad, nada menos que catorce puntos, 14 de 24, porque la cosa en la duodécima jornada iba 33-19. Con referencia a estas once últimas le ha aventajado en diez, mientras ha igualado con el Real Madrid a 25 y solo es superado por el Atlético de Madrid que, pese a perder en Leganés, se ha llevado 27.

Aquel célebre curso 83-84

El equipo supo ante el Celta sobreponerse una vez más, aunque de tres cuartos hacia adelante faltó la cohesión de otras tardes, a la ausencia de Oihan Sancet, su máximo artillero en esta Liga, y así mantener una racha de partidos invicto en competición liguera que, para igualarla, hay que retrotraerse cuatro décadas. A aquel Athletic añorado, ocupante de la anterior Gabarra, que fue capaz de llevarse dos títulos de Liga y otro de Copa con un Javier Clemente que sacó chispas de aquella meritoria plantilla. Algo similar, pero siempre salvando las distancias, a lo que Ernesto Valverde viene haciendo con el actual.

La temporada 1983-1984 está grabada con letras de oro en la rica historia del club. El colosal doblete dejó perplejo a todo el mundo y con las ganas a los poderosos, como aquel Barça de Maradona. Entonces llegaron a ser hasta quince las jornadas que, de manera consecutiva, el conjunto rojiblanco estuvo sin probar las hieles de una derrota. Desde el 9 de octubre, cuando se caía en el Sánchez Pizjuán contra el Sevilla por 4-1, hasta el 29 de enero, con el Barcelona ganado en la vieja Catedral por un gol a dos. En medio de aquel calendario simétrico hasta diez victorias -Osasuna, Murcia, Valladolid, Betis, Valencia, Cádiz y Zaragoza, esto es, todos los partidos que llegó a jugar como local, además de Atotxa, Cádiz y Salamanca-, por cinco empates, los conseguidos frente a Mallorca, Espanyol, Sporting, Real Madrid y Málaga.

La siguiente oportunidad para agrandar la actual racha, y así no perder las muchas opciones de meterse en la próxima Champions, y de paso seguir acercándose a aquella del siglo pasado llegará este domingo (18.30 horas) en la visita de un Leganés que llega a Bilbao sin apuros porque queda lejos de la zona de peligro gracias a las sonadas victorias alcanzadas sobre el Barça en Montjuïc y el Atlético en Butarque. Muy resaltable el ejercicio que viene realizando el equipo pepinero que entrena Borja Jiménez en su retorno a la máxima categoría. Una buena piedra de toque para un Athletic que no juega en Liga ante su gente desde el 8 de diciembre, cuando se impuso al Villarreal de Marcelino García Toral.