La Asociación Española de Pediatría (AEP) ha planteado crear una estrategia unificada de prevención del suicidio en la población pediátrica, con el objetivo de "disminuir la morbimortalidad por suicidio y mejorar la atención de las personas de riesgo y sus familias".
Ante el incremento de casos de síntomas depresivos, autolesione y conductas suicidas en niños y adolescentes y la creciente inquietud de familias y profesores ante esta situación, la AEP constituyó en 2021 un Grupo de Trabajo multidisciplinar de Salud Mental en la Infancia integrado por profesionales pediátricos de la Sociedad de Psiquiatría Infantil (SPI), la Sociedad Española de Urgencias Pediátricas (SEUP) y la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPAP).
Recomendaciones para frenar el suicidio entre los menores
Ahora, han realizado una serie de recomendaciones para mejorar esta situación, entre las que se encuentran "insistir a los estamentos gubernamentales para la creación de un plan de prevención de suicidio", así como mejorar e incrementar los recursos materiales y humanos de atención a la salud mental dirigidos a niños y adolescentes, tanto en los centros de atención primaria como especializada.
Por último, también insisten en la importancia de implantar programas de formación para los centros escolares dirigidos a profesores, orientadores y resto de profesionales que atienden a los niños.
Deterioro de la salud mental de niños y adolescentes
Los pediatras advierten de que a lo largo de los últimos años, y en especial desde que se inició la pandemia de covid-19, la salud mental de los niños y los adolescentes "se está deteriorando". "De modo especial, los adolescentes están presentando más síntomas depresivos, autolesiones y conductas suicidas La situación resulta alarmante y los medios de comunicación están haciendo partícipe a la sociedad de ello", avisan.
Así, indican que antes de la pandemia se estimaba que el 30 por ciento de los menores habían presentado ideación suicida en algún momento, el 10 por ciento lo habían intentado y un 2 por ciento de forma seria, requiriendo atención médica. Se calcula, además, que 18 por ciento de los menores se infligen autolesiones antes de los 18 años.
Los estudios que indican aumentos tras la pandemia en todos estos indicadores son numerosos. Por ejemplo, la Fundación ANAR ha atendido en este período un 145 por ciento más llamadas de menores con ideas o intentos de suicidio y un 180 por ciento más de autolesiones con respecto a los dos años previos.
En el año 2020, se suicidaron en el Estado 14 niños menores de 15 años, el doble que el año anterior. Entre el grupo de jóvenes de 15 a 29 años el suicidio es ya la segunda causa de fallecimiento, solo superada por los tumores malignos. "El sexo femenino, la presencia de síntomas depresivos, una mayor exposición a casos de covid-19 y un mayor consumo de redes sociales son factores de riesgo para la conducta suicida en la actualidad", apuntan los pediatras.