Los presupuestos vascos de 2024 se aprobarán la semana próxima sin incorporar enmiendas de la oposición tras haber decaído en comisión parlamentaria al haber votado en contra de todas ellas los grupos que integran el Gobierno vasco, PNV y PSE-EE.
Después de haber superado el pasado martes las enmiendas a la totalidad de EH Bildu, Elkarrekin Podemos-IU, PP, Vox y Ciudadanos, el dictamen del proyecto legislativo que contiene cuentas del último año de la legislatura ha quedado listo hoy para su ratificación definitiva en el pleno del Parlamento Vasco que se celebrará el viernes de la próxima semana.
Este jueves se han votado en comisión las enmiendas parciales presentadas tanto por los grupos de la oposición como por los que componen el Ejecutivo de Iñigo Urkullu. PNV y PSE-EE han vuelto a hacer valer su mayoría, han rechazado todas las alegaciones del resto del grupos y han sacado adelante el texto con el añadido de sus propias enmiendas y de las pactadas con otras formaciones.
Las acordadas con otros grupos se concretan en 50.000 euros de ayuda para la Asociación Pablo Ibar, y en la ya tradicional reserva de 230.000 euros para financiar la caravana vasca que lleva productos alimenticios y de higiene a los campamento de refugiados saharauis.
Las alegaciones de PNV y PSE-EE están relacionadas, entre otras materias, con la bonificación de las tarifas de transporte público (15 millones); con los comedores de los centros públicos escolares (3 millones); y con los equipamientos sanitarios de Osakidetza (2 millones).
Los partidos de la oposición han reprochado al Gobierno vasco su falta de interés por acordar, la misma queja que han trasladado PNV y PSE-EE hacia el resto de formaciones argumentando la cercanía de la elecciones autonómicas.
Leire Pinedo (EH Bildu) ha defendido sus enmiendas y ha responsabilizado al Ejecutivo de Gasteiz de la falta de entendimiento, del mismo modo que lo ha hecho el popular Carmelo Barrio, quien ha considerado que "no ha habido ni negociación, ni acercamiento".
José Manuel Gil (Ciudadanos) se ha centrado en tachar los presupuestos de "continuistas" y "poco adecuados" para afrontar los retos actuales, mientras que Elkarrekin Podemos-IU no ha tomado la palabra y Vox no ha asistido a la comisión.
Desde los grupos que forman el Gobierno vasco, Alaitz Zabala (PNV) ha considerado que la oposición "no cree" en sus propias enmiendas porque no han llamado a PNV y PSE para tratar de negociarlas. Por su parte, el socialista Ekain Rico ha apuntado que las alegaciones de la oposición "no contienen un programa alternativo" y que no era posible apoyarlas "en un escenario de confrontación" escenificado, a su juicio, con las cinco enmiendas de totalidad.