Ucrania recibió un nuevo espaldarazo con la llegada este martes de los primeros tanques Challenger 2 británicos, mientras continúa el pulso entre los militares rusos y ucranianos en la región de Donetsk, la zona más militarizada del frente ucraniano. “Estos tanques, suministrados por el Reino Unido, acaban de llegar a nuestro país”, tuiteó ayer el ministro de Defensa ucraniano, Oleksii Réznikov.
El titular de Defensa, que publicó un vídeo en el que se ven al menos seis tanques en los que ondean banderas ucranianas, no especificó el número total de blindados incluidos en la presente partida.
Se trata del segundo envío de tanques europeos de esta semana y es que el lunes Kiev recibió 18 tanques Leopard 2 y 40 vehículos Marder de infantería ligera procedentes de Alemania.
El Kremlin reaccionó a la llegada de los tanques alemanes con la denuncia de que Berlín “arma activamente a Ucrania”, por lo cual “Alemania incrementa su nivel de participación en este conflicto”. “Este tipo de acciones y decisiones no auguran nada bueno”, alertó Dmitri Peskov, el portavoz presidencial.
Francia promete más obuses
Por su parte, el ministro francés de Defensa, Sébastien Lecornu, afirmó ayer que Francia duplicará a partir de marzo las entregas a Ucrania de proyectiles de artillería de 155 milímetros hasta llegar a las 2.000 unidades mensuales. Este tipo de obuses son utilizados por los cañones franceses o por los alemanes, y pueden alcanzar objetivos situados a 40 kilómetros de distancia.
Lecornu explicó que París también enviará a Kiev próximamente un sistema de defensa antiaérea tierra-aire SAM/T que “permite garantizar tanto la protección del campo de batalla como de la población civil en las ciudades”.
Ante esto, Moscú no se quedó de brazos cruzados. El ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, visitó ayer varias fábricas militares para supervisar la producción de armamento y exigir la aceleración de los ritmos de producción.
Según Defensa, la industria militar rusa ha aumentado notablemente la producción de munición, volumen que se incrementará “7-8 veces más” antes de finales de este año.
Pulso en el Donbás
En tanto, en el Donbás se mantiene el pulso entre ambos bandos, sin que se observen cambios significativos en los últimos días, aunque el estadounidense Instituto de Estudio de la Guerra (ISW) reconoció “probables avances” rusos en los bastiones de Avdíivka y Bajmut.
El comandante de las Fuerzas Terrestres de Ucrania, Oleksandr Syrskyi, reconoció que las tropas rusas no desisten de sus intentos de rodear Bajmut, que han logrado mantener “gracias al heroísmo y profesionalidad de nuestras acciones militares, (...) y al uso efectivo de las capacidades de maniobra y armamento”.
Según el ISW, las fuerzas rusas y especialmente el grupo de mercenarios rusos Wagner intentan concentrarse cada vez más en Avdíivka, aledaña a la capital regional de Donetsk. Moscú habría optado por movilizar a las unidades de asalto más experimentadas de Wagner en la ofensiva en Avdíivka. En cambio, el jefe de este grupo paramilitar ruso, Yevgueni Prigozhin, negó rotundamente esta afirmación al asegurar que “en Avdíivka no hay y no ha habido ninguna unidad de Wagner”. “Todas las tareas allí están exclusivamente a cargo del Ejército. Y les deseamos éxitos en el cumplimiento de esta misión”, zanjó.