Actualizado hace 4 horas
Final feliz para los propietarios del piso de la calle Mariano Ciriquiain de Portugalete, cerca de la urbanización de Peñota, okupado este pasado fin de semana. Esta mañana, la Policía Local ha procedido a la retirada de las pertenencias que dejaron en el interior de la casa dos de los okupas, objetos que han sido trasladados a sede judicial. Esto ha permitido que los propietarios de la vivienda ya pueden acceder a la misma.
Ayer miércoles, los vecinos decidieron dejar de movilizarse después de haberse concentrado dos días seguidos para denunciar la okupación y la sensación de inseguridad que sufrían desde el pasado sábado, momento en que detectaron ruidos y movimientos en el piso que está deshabitado.
La labor policial ha sido fundamental ya que fueron los agentes los que consiguieron convencer a uno de los okupas a que abandonase la vivienda, algo que se produjo el pasado martes. Sin embargo los otros dos okupas que en ese momento no estaban en el interior de la vivienda, no regresaron dejando dentro del piso sus pertenencias. Y ha sido esto precisamente lo que ha impedido que los propietarios pudieran acceder a la vivienda.
Desde el bufete de abogados AD de Bilbao, el letrado Iñigo Iglesias ha explicado en ONDA VASCA que se necesitaba la intervención de un tercero, es decir, de un juez que diera la orden para poder entrar en el piso y retirar las pertenencias de los okupas. La justicia ha dado el visto bueno para acceder a la vivienda se han retirado las pertenencias para culminar el desalojo. Ahora, los vecinos de la calle Mariano Ciriquiain podrán volver a la normalidad tras cinco días de mucha tensión.