Con casi 1.700 puentes en su catálogo, Navarra está obligada a revisar y reparar periódicamente estas singulares estructuras que no resultan vitales únicamente para salvar ríos, sino que también se elevan sobre vías de ferrocarril o carreteras. Sólo este año, la Dirección General de Obras Públicas e Infraestructuras, dentro de las labores de conservación, ha realizado trabajos de mantenimiento y mejora de más de una treintena de puentes de la Red de Carreteras de Navarra, con una inversión total prevista que supera los 4,5 millones de euros.
En la actualidad, en la Comunidad Foral existen 1.686 puentes con una longitud –o luz– de más de 3 metros que suman en total 45,6 kilómetros. “Anualmente se inspeccionan en Navarra unos 350 puentes y se actúa de forma gradual sobre las infraestructuras que requieren labores de conservación o mantenimiento”, según indican desde la Dirección General de Obras Públicas e Infraestructuras del Gobierno de Navarra.
La singularidad de estas estructuras en el conjunto de toda la red, la variedad en sus tipologías y los posibles deterioros que puede presentar el estado de los puentes, que van desde los causados por las inundaciones, hasta el que genera el paso de miles de vehículos al día, requieren “una actualización constante que permita ordenar las intervenciones de conservación en función de un abanico de parámetros técnicos y económicos”, exponen desde el Departamento de Cohesión Territorial.
29 ya ejecutados
Durante el presente año, dentro de la calendarización de intervenciones prioritarias programadas, la Dirección General de Obras Públicas e Infraestructuras prevé reparar un total de 33 puentes, de los cuales 29 ya se encuentran mejorados y 4 están en ejecución. La inversión total prevista para este 2022 para las actuaciones en los 33 puentes asciende a 4.537.259,11 euros.
Los municipios donde se han acometido dichas actuaciones son Isaba, Igal, Urroz Villa, Burguete, Baztan, Doneztebe, Errazkin, Leitza, Lekunberri, Lizasoain, Ustegui, Irurtzun, Lodosa, Valle de Yerri, Zábal, Mendigorría, Mendavia, Larraga, Miranda de Arga, Carcastillo, Mélida, Petilla de Aragón, Cascante, Peralta, Tudela, Esteribar, Berriozar, Pamplona, Cendea de Olza y Zizur Mayor. Si se agrupan por centros de conservación, de las 33 infraestructuras en las que se ha intervenido, 4 se encuentran en el distrito de Aoiz, 2 en Mugairi, 8 en el distrito de Irurtzun, 4 en Estella, 6 en Tafalla, 4 en Tudela y 5 en Pamplona.
La obra de mayor cuantía
La obra que ha requerido una mayor inversión en un puente este año en Navarra, de 1.500.000 euros, ha sido la llevada a cabo en el puente sobre el río Ebro en Tudela. Este puente presentaba desperfectos desde 2011 que comprometían su seguridad y, además, se sitúa sobre el río Ebro, que es el más caudaloso de la Península Ibérica y está sometido a fuertes crecidas. “Por ello se considera una infraestructura especialmente sensible frente a una situación de avenida. Por ello, se han rehabilitado las 17 bóvedas del puente, así como de elementos estructurales como alzados, tímpanos y tajamares que se encontraban deteriorados”, señalan desde Obra Públicas.
Pero no sólo se han realizado trabajos de mantenimiento o mejora de puentes sobre ríos, sino que entre las 33 actuaciones programadas por el Departamento de Cohesión Territorial este año figuran infraestructuras como la ubicada en Berriozar en la PA-34, que pasa por encima de las vías del tren, o sobre otras que discurren por encima de carreteras, como el paso situado en la NA-137, en La Contienda, que han requerido en todos los casos inversiones importantes de varios cientos de miles de euros.