Los salarios pactados en convenio subieron de media un 2,89% hasta febrero, cifra ligeramente superior a la registrada en enero (2,81%), pero 3,2 puntos inferior al último IPC adelantado, cuya tasa interanual escaló en el segundo mes del año hasta el 6,1%, según datos extraídos de la estadística de negociación colectiva del Ministerio de Trabajo y Economía Social.
Este incremento salarial es menor que la subida del 8% acordada entre el Gobierno central y los sindicatos para el salario mínimo interprofesional (SMI) de este año y que el alza experimentada por las pensiones contributivas (+8,5%) y está algo más en línea con las directrices marcadas en el último pacto de convenios que firmaron CCOO, UGT, CEOE y Cepyme, cuya vigencia finalizó en 2020.
Los sindicatos quieren renovar este acuerdo con las organizaciones empresariales y ya han hecho una propuesta para negociar con la patronal. De hecho, tienen previsto reunirse hoy para abordar esta negociación.
En su propuesta, difundida hace unos días, CCOO y UGT piden a CEOE subidas salariales iniciales del 5% para 2022, del 4,5% para 2023 y del 3,75% para 2024, con la inclusión de una cláusula de revisión salarial mixta que atienda tanto al mantenimiento del poder de compra de los salarios como a la situación económica de las empresas, medida por la evolución de su margen de beneficios.
Nuevos criterios sindicales
De esta forma, los sindicatos han reformulado su propuesta salarial introduciendo nuevos criterios sobre la cláusula de revisión salarial, que ya no se ligará solo a la evolución de los precios, sino también a la marcha económica de las empresas. Así, CCOO y UGT proponen que a las subidas salariales iniciales planteadas para cada año del periodo 2022-2024 (5%, 4,5% y 3,75%) se les sume un alza adicional por la desviación de la inflación en cada uno de los años del acuerdo.
Además, dicha subida salarial adicional, que se fijará a través de la cláusula de revisión, se vinculará a la información que se obtenga a través del Sistema de Información Económica para la Negociación Colectiva (SIENC) para que la recuperación del poder de compra de los salarios tenga relación con la evolución económica de los sectores a través de “un dato fidedigno”.
Según la propuesta sindical, esta cláusula de recuperación salarial operará preferentemente al cierre de cada uno de los años y, en todo caso, serán los propios convenios colectivos los que establezcan otras secuencias de entrada en vigor de la cláusula: al final del ciclo 2022-2024 o una distribución porcentual en ambos tiempos (un porcentaje de la recuperación al final del año y otro al final del ciclo).
Los sindicatos defienden que la negociación con CEOE no puede ir más allá del 1 de mayo, y si no logran acuerdo, han instado al Gobierno a establecer una contribución mínima en el Impuesto sobre Sociedades del 15% o el 20% sobre el total de beneficios, un planteamiento que no ha gustado a CEOE. Según la estadística de Trabajo, la mayor parte los convenios registrados hasta febrero no cuentan con cláusula de revisión salarial para evitar pérdidas de poder adquisitivo.
Sin cláusula salarial
- Al margen del IPC. La mayor parte los convenios registrados hasta febrero no cuentan con cláusula de revisión salarial para evitar pérdidas de poder adquisitivo. En concreto, de los 1.941 convenios contabilizados, sólo el 16,6% (322) contaban con una cláusula de garantía salarial y de ellos, 228 contemplan que ésta se aplique con efectos retroactivos. Los convenios con cláusula de revisión afectan a algo más de 1,64 millones de trabajadores de los casi 6 millones amparados por convenio.