El gobernante Partido Socialdemócrata (PSD) habría ganado las elecciones parlamentarias de Rumanía con el 26% de los votos, según los primeros sondeos a pie de urna tras el cierre de los colegios electorales.
La ultranacionalista Alianza para la Unión de los Rumanos (AUR) habría quedado en segundo lugar con hasta el 20% de los votos, en tercer lugar el gobernante Partido Nacional Liberal (PNL, de centroderecha), con alrededor del 15%, y en cuarta posición quedaría la formación nacionalista de centro Unión Salvar Rumanía (USR), con hasta el 15%.
Los analistas preveían un giro a la derecha en Rumanía, miembro de la OTAN y la Unión Europea (UE), tras la inesperada victoria del prorruso Calin Georgescu en las presidenciales de hace una semana, cuando obtuvo casi el 23% de los votos.
El recuento deberá ratificar los sondeos, que la semana pasada fallaron estrepitosamente porque no predijeron la victoria de Georgescu.
Las dos formaciones que han dominado la política rumana en las últimas décadas, el PSD y el PNL, gobernando desde 2021 en una gran coalición, salen paradas de forma diferente en estas primeras proyecciones.
Si se cumplen los sondeos, el PSD perdería menos de tres puntos porcentuales respecto a las pasadas legislativas de 2020, mientras que el PNL acumularía una caída de diez puntos.
El control del Parlamento será un objetivo clave para las fuerzas europeístas, PSD, PNL y USR, como contrapeso ante Georgescu en caso de que llegue a la presidencia.
La formación que más crece es AUR, que dobla su porcentaje desde el 9% de 2020 hasta el 19-20% que le dan ahora los sondeos.
Con todo, en la formación había esperanzas de ganar estas elecciones y el resultado ha sido recibido con cierta decepción.
El líder de AUR, George Simion, ha prometido que si llega al poder suspenderá la ayuda militar a Ucrania y, con una retórica similar a la del primer ministro húngaro, el ultranacionalista Viktor Orbán, asegura que quiere la "paz" y una "tregua" en el conflicto desatado por la invasión rusa.
El político ultra se presenta como un defensor de los valores tradicionales y los "verdaderos rumanos", con una retórica que mezcla aspectos nacionalistas, irredentistas, religiosos y populistas.
Simion apoya a Georgescu en la segunda vuelta de las presidenciales.
Otras dos formaciones de ultraderecha, S.O.S y el Partido de la Juventud, podrían tener representación parlamentaria porque en algunos sondeos superan por poco el umbral necesario del 5%.
Estas legislativas han quedado ensombrecidas por una semana de alto voltaje en la política rumana, primero por la sorpresiva victoria de Georgescu y después por el recuento ordenado por el Tribunal Constitucional debido a las sospechas de fraude.
Apenas conocido, Georgescu, apoyado por una sofisticada estrategia en TikTok que alcanzó cientos de millones de visualizaciones, declaró no haber gastado fondos en su campaña, lo que levantó sospechas de financiación ilegal e interferencias extranjeras.
Rumanía, hasta ahora un bastión de estabilidad en la región del Mar Negro y un aliado clave de la OTAN en la ayuda occidental a Ucrania, se encuentra ahora sumida en una inédita situación de incertidumbre política.
El Jefe del Estado es el responsable de designar a un primer ministro encargado de formar gobierno una vez que las dos cámaras se hayan constituido y elijan a sus presidentes.