Los partidos que durante los últimos cuatro años han sostenido al Gobierno de María Chivite no solo revalidan su mayoría, sino que podrían ampliarla ligeramente. Así se desprende de la encuesta elaborada por Gizaker, que da a los socios del Ejecutivo foral una mayoría holgada de 32 escaños, dos más que ahora, que podrían ser 33 si el último asiento que el sondeo deja en el aire cae del lado de las fuerzas progresistas. La mayoría absoluta está en los 26 parlamentarios.
La encuesta deja en general buenos datos para los cuatro partidos que apoyan al Gobierno : PSN, Geroa Bai, EH Bildu y Contigo-Zurekin (coalición de Podemos, IU y Batzarre). Los tres primeros apuntan al alza mientras que la entente izquierdista cae levemente respecto a 2019 pero mantiene sus tres escaños.
La mayoría volvería a estar liderada por el PSN, que conserva los 11 escaños y podría lograr uno más. Los socialistas suben algo más de medio punto y María Chivite podría continuar en la presidencia del Gobierno con el apoyo de las mismas fuerzas que facilitaron su investidura en 2019.
Barkos, la mejor valorada
La encuesta de Gizaker vuelve a situar a la candidata de Geroa Bai, Uxue Barkos, como la aspirante mejor valorada. La expresidenta recibe una nota media del 5,52 justo por delante de la presidenta actual, María Chivite, con un 5,04. Ambas son las únicas que aprueban. La candidata socialista es además la más conocida. El 95,2% de los encuestados dicen saber quién es, frente al 88,4% de Barkos. Del resto, solo Javier Esparza (84,6%) es mayoritariamente conocido, aunque en su caso la nota es mucho peor, un 3,8. El peor valorado es Javier García (PP), con un 3,43 de nota media y un conocimiento del 46%. Cerca del aprobado se sitúa Laura Aznal, con una nota del 4,94 y un conocimiento del 55,3%. Por su parte, Begoña Alfaro (Contigo-Zurekin) recibe una valoración del 4,75 y un conocimiento del 34,9%.
Crece también Geroa Bai, que no ve penalizada su presencia en el Ejecutivo foral y que incluso podría lograr un escaño adicional. La formación de Uxue Barkos mantiene la tercera plaza con los nueve escaños actuales, que podrían ser uno más si el último asiento que se disputa con UPN y PSN cae de su lado, lo que le garantizaría una presencia importante en el futuro Gobierno.
La mayor subida en cambio es la de EH Bildu, que supera los siete escaños actuales (que en 2019 no llegaron a ser ocho por unos pocos votos) hasta los nueve parlamentarios, que volverían a ser imprescindibles para una mayoría de Gobierno. Sería el mejor resultado de la izquierda abertzale en Navarra, aunque insuficiente para superar a Geroa Bai como tercera fuerza electoral. La diferencia entre ambas formaciones se reduce a poco más de un punto porcentual.
La división en cambio penaliza a la derecha, que pierde dos de los escaños que tiene ahora Navarra Suma (20), y que podrían ser tres. UPN (14-15) vuelve a las cifras de 2015, cuando también concurrió en solitario, mientras que el PP ve limitado a tres escaños su regreso al Parlamento. Vox no lograría representación.
El PSN tiene la llave de la Alcaldía de Pamplona
El PSN volverá a tener la llave de la Alcaldía de Pamplona tras las elecciones del próximo 28 de mayo. UPN, que acude a esta cita en solitario tras romper Navarra Suma, baja de los 13 concejales actuales a 9. Uno menos de los que tuvo en 2015, la última vez que concurrió a los comicios con sus siglas, pero que le pueden servir para que Cristina Ibarrola tome el relevo de Enrique Maya, de acuerdo con la encuesta elaborada por Gizaker.
EH Bildu, pese a que incrementa su respaldo social y pasa de 7 a 8 ediles, necesita el apoyo de PSN y Geroa Bai para convertir a Joseba Asiron en alcalde. Una posibilidad que a día de hoy está descartada con esta distribución de escaños, ya que los socialistas –que pueden conservar los 5 asientos que tienen o perder uno como máximo – han repetido que votarán a Elma Saiz, su candidata.
Geroa Bai experimenta el mayor crecimiento porcentual, lo que le permite pasar de dos concejales que tiene en estos momentos a tres, gracias al tirón de su candidato, el senador Koldo Martínez.
El PPN, en el estreno de Carlos García Adanero tras haber sido expulsado de UPN, consigue que esta sigla tenga representación en el Ayuntamiento pamplonés por segunda vez. Accede con dos ediles, los mismos que tuvo tras los comicios de 2011.
Más incierta es la presencia de Contigo-Zurekin. La nueva marca que aglutina a Podemos, Izquierda Unida, Batzarre e independientes, está rozando el 5% exigido para acceder al Consistorio. De conseguirlo, convertiría a Txema Mauleón en concejal y amenazaría al quinto escaño del PSN. Este espacio se quedó hace cuatro sin representación en Pamplona al concurrir en cuatro listas diferentes (Podemos, Izquierda-Ezkerra, Aranzadi y Ganemos) y ahora tiene buenas expectativas de regresar al haber pactado una plancha de unidad.
Fuera de cualquier posibilidad de entrar en el Ayuntamiento quedan Vox (el sondeo le da una intención de voto del 1,7%) y Ciudadanos, que apenas recibe el 0,3%.