La últimas agresiones sufridas la pasada semana durante el desempeño de su labor han llevado a los trabajadores de las ambulancias que prestan servicio en Álava a concentrase esta mañana ante el edificio de consultas externas del Hospital Universitario de Álava.
El comité de empresa de Ambulancias La Pau-Araba, concesionaria del servicio, ha exigido implicación del Gobierno Vasco frente a las agresiones que sufre el personal sanitario mientras desempeña su labor asistencial. En la concentración han tomado parte representantes sindicales de LAB, ELA, CCOO y ESK que componen el Comité de Empresa del Transporte Sanitario Urgente subcontratado.
El pasado 5 de julio los sindicatos informaban de dos agresiones sufridas por trabajadores de ambulancias. En un primer caso se producía "en un domicilio particular, donde una compañera fue atacada por una paciente que portaba un cuchillo, pudiendo huir finalmente del lugar de los hechos".
En el segundo, "otros dos compañeros sufrieron una agresión en vía pública siendo recibidos violentamente entre insultos cuando accedían al lugar de actuación y, una vez que se encontraban con el paciente, con un mayor grado de agresividad recibieron empujones y patadas por el numeroso grupo de personas que se encontraban alrededor".
"En ambas situaciones se ha dado una misma circunstancia, que estas profesionales tuvieron que acceder a unas zonas y tipo de emergencia de alto riesgo de poder sufrir agresiones, sin una presencia policial", afirma el comunicado publicado por el sindicato LAB en su página web esta misma mañana.
Denuncian "la poca o nula implicación del Departamento de Interior, Emergencias de Osakidetza, y su Centro Coordinador, a la hora de solucionar definitivamente esta grave situación" y la enmarcan "dentro de un contexto de precariedad laboral y subcontratación, que sirven al Gobierno Vasco para eludir en el día a día su directa responsabilidad"