Con el verano a la vuela de la esquina son muchas las personas que están ya organizando sus vacaciones pensando en disfrutar del buen tiempo en destinos apetecibles y sin gastarse mucho dinero en el intento. También es tiempo de realizar pequeñas escapadas a otras ciudades aprovechando las numerosas conexiones aéreas de las aerolíneas de bandera y las de bajo coste.
Muchos de estos viajes empiezan o están condicionados por la búsqueda de un vuelo barato, por lo que si sigues estos trucos podrás ahorrar al menos entre un 10% y un 20% de los billetes y conseguir un viaje o unas vacaciones a menor precio, cuestión muy a tener en cuenta en estos tiempos de alta inflación.
- Planifica y reserva cuanto antes. El precio del billete no depende sólo de la anticipación con que se compre, pero es un factor determinante. Si tienes claro el destino, el presupuesto y las condiciones, cuanto antes hagas la reserva, más barato te saldrá. Por lo general, el momento ideal para comprar un vuelo suele ser entre siete y diez semanas antes del viaje, según Skyscanner.
- Flexibilidad en las fechas y el destino. Si viajas fuera de temporada o no te importa trasnochar o madrugar para tu vuelo tus billetes serán más baratos. Los vuelos más baratos siempre serán los programados a última hora de la noche o primera hora de la mañana.También es determinante la fecha, ya que en temporada alta los precios se disparan. Una buena fecha es poco después del verano, o de las navidades, o Semana Santa. Por supuesto si no estás condicionado por un destino concreto y estás abierto a otros similares o cercanos verás cómo mengua tu factura.
- Rastrea las web de viajes en distintos días de la semana. Comprobar el precio del billete en varios días de la semana te permitirá ver la fluctuación del mismo y decidirte por el más barato. La leyenda señalaba hasta hace poco que el mejor día para reservar un vuelo es el martes, pero ahora ha podido cambiar ya que las compañías no fijan sus precios de manera manual, sino que utilizan complejos algoritmos que tienen en cuenta el número de asientos disponibles, el tiempo, la popularidad del destino o los precios de la competencia, entre otros factores.
- Reserva ida y vuelta por separado. La aparición de las líneas de bajo coste hace que esta opción sea muchas veces más barata. No así en las compañías de bandera, que sí acostumbran a aumentar sus tarifas si la ida y la vuelta se compran por separado. Las low cost permiten combinar viajes sin ningún suplemento e ir con una y volver con otra. Otra opción interesante que puedes explorar es comprar dos billetes de ida en la misma compañía. Es decir, uno para ir a tu destino y otro sólo de ida para viajar de ti destino a casa.
- La opción de las escalas y los aeropuertos cercanos. Si dispones de tiempo y no tienes inconveniente en desplazarte una alternativa es consultar los precios de los aeropuertos de ciudades cercanas a tu destino y que tengan precios más atractivos. Los pequeños aeropuertos regionales o autonómicos suelen ofrecer mejores tarifas que los aeropuertos grandes o internacionales. Muchas veces el sobre coste (en tiempo y en dinero) del desplazamiento hasta tu destino en autobús, taxi, tren o coche compartido o alquilado merecerá la pena. Las escalas es otro factor que encarece el billete. Todos preferimos los vuelos directos, pero si no te importa hacer escalas es otra forma de conseguir pasajes más baratos.
- Haz la búsqueda para un solo pasajero y con pestaña oculta. Si vas a viajar en grupo y no os importa ir separados en el avión prueba a realizar la búsqueda uno por uno. Cuando en la web de una aerolínea se buscan vuelos para varios viajeros, puede ser que a uno de ellos se le asigne un asiento más caro en función de la disponibilidad para ir todos juntos. Normalmente, la compañía tenderá a igualar las condiciones del resto de asientos con el más caro. También a la hora de informarte en las búsquedas por internet no descartes poner tu ordenador en la configuración "Pestaña oculta" para que no quede rastro de tu búsqueda. Las compañías trabajan con programas y algoritmos que si detectan un inusitado interés por una compra concreta aumentan el precio. Con las "Cookies" ocurre lo mismo. Bórralas antes de realizar nuevas búsquedas para evitar publicidad indeseada y para evitar que aumente el precio de tu billete.
- Cuidado con los extras. En muchas ocasiones el billete lleva incorporado por defecto servicios extras que no necesitas o no vas a utilizar. Presta atención porque en los vuelos cortos y con escaso equipaje pueden permitirte un ahorro sustancial. Sobre toso si estás dispuesto a renunciar a algunos extras prescindibles.
- La tecnología y las aplicaciones también ayudan. Herramientas como los buscadores de vuelos baratos, suscribirse a las newsletters de las compañías aéreas, revisar la alertas de las propias compañías o agencias de viajes, o estar atentos a las promociones, ofertas y descuentos supondrán que puedas conseguir pequeños chollos. También puedes descubrir algún error o incorrección en los precios, que las compañías suelen cometer a veces. Aprovecha esta circunstancia antes de que se subsane y hazte con algún chollo si puedes.