Los vitorianos coinciden: ¿dónde se comen las mejores croquetas?

Este lunes 16 de enero, se ha celebrado el Día Internacional de la Croqueta, todo un clásico en las barras de los bares de Vitoria y Álava, eso sí, en clara competencia con la tortilla de patata.

Un frito que tiene sus seguidores más fieles en la capital alavesa, y es que en Vitoria somos muy croqueteros los fines de semana a la hora del vermuteo.

En todos los barrios los vecinos saben de un bar que no falla a la hora de elegir la croqueta como pintxo porque es casera, crujiente, nada aceitosa y cremosa por dentro.

Como Alberto Chicote en su famoso programa de 'Pesadilla en la cocina', que siempre pide croquetas en los restaurantes que visita con resultados nefastos. El famoso chef tiene una máxima: si las croquetas son buenas y caseras, seguro que el resto del menú será de calidad.

Los cocineros en Vitoria lo tienen claro: la que triunfa es la de jamón, seguida de boletus, queso, bacalao y morcilla.

¿Dónde se comen las mejores croquetas?

Hay un lugar en la capital alavesa donde han salido las mejores croquetas durante años. La mayoría de los vitorianos coincide: el bar Bendaña del Casco Viejo (Kutxi, 63).

Durante casi 20 años prepararon, con todo el trabajo que suponía, su propia masa de bechamel con un éxito abrumador. Una especialidad que dejaron de elaborar hace unos tres años, en 2019.

El primer sábado del mes, cuando se celebraba el Mercado de la Almendra Medieval, las largas colas que salían de este local eran muy llamativas.

¿Y por qué hacía cola tanta gente en Vitoria los sábados al mediodía? Pues para probar la famosa croqueta del Bendaña, que era muy popular no solo por su calidad y sabor, sino también por su tamaño, muy superior a las croquetas de bocado a las que estamos acostumbrados.

Bar Bendaña en el Casco Viejo de Vitoria

Oreja, tortilla de patata y caldo

El Bendaña, un lugar de refererncia en el Casco Viejo, también cuenta hoy en día su su barra con otras elaboraciones que no fallan entre sus clientes.

La tortilla de patata, los pintxos de oreja y el caldo son tres de sus clásicos en este local que abre temprano para dar de desayunar a los más madrugadores.