Tras más de nueve meses sin ver portería, el exalbiazul Lucas Pérez se reencontró el pasado lunes con el gol. Su tanto, además, le sirvió al Elche, que visitaba el Coliseum Alfonso Pérez, para vencer al Getafe y sumar así su primer triunfo de la temporada. Una ocasión especial que el delantero gallego, conocido de sobra por sus desesperantes gesticulaciones, aprovechó para evitar todo acto de autocrítica y señalar culpables después de haberse marchado del Alavés por la puerta de atrás.
Posteriormente, ya con el partido entre azulones y franjiverdes finalizado, el atacante gallego atendió a la cadena SER y habló, entre otras cosas, de su paso por la capital vasca. "Es agua pasada, simplemente necesitaba salir del club. El Alavés no quería que me marchara, pero yo necesitaba un cambio porque se generó una atmósfera en la que todo lo malo que pasaba era cosa mía. Cuando se marchó Abelardo y llegó Calleja se demostró que el problema no era yo", explicó.
La conversación sobre su relación con el técnico asturiano no terminó ahí y Lucas desmintió cualquier falta de respeto entre ambos: "Se dijeron o se insinuaron algunas cosas que no fueron ciertas y eso duele. Cuando se fue, Abelardo cargó duramente contra mí y, por ello, no jugaría en ningún equipo entrenado por él. Creo que lo mejor es que cada uno siga su camino, pero es algo que quiero dejar pasar. Ahora estoy centrado en el Elche".
Finalmente, el coruñés quiso aclarar que, pese a todo lo sucedido, no guarda mal recuerdo de Vitoria. "Creo que, al marcar durante siete jornadas consecutivas, hice algo de historia en el Alavés. Eso no había pasado nunca en el club. Además, acabamos consiguiendo la permanencia en el año del Centenario", concluyó