Durante su presentación oficial como nuevo técnico del Alavés, Luis García Plaza no quiso confirmar si en su contrato existía algún tipo de cláusula por la cual continuaría en la temporada 2023-24 en Vitoria en caso de ascenso a la máxima categoría
A lo largo de estos meses, el mutismo respeto a este asunto capital de la configuración del siguiente proyecto ha sido máximo hasta que este miércoles ha sido el propio técnico madrileño quien ha zanjado las dudas en una entrevista concedida a Radio Vitoria.
Luis García ha asegurado que, en el caso de que el gran objetivo del alavesismo termine haciéndose realidad dentro de unos meses, estará sujeto a un vínculo contractual con la entidad del Paseo de Cervantes. Todo hace indicar pues en ese caso que sería el encargado de pilotar la nave gasteiztarra en Primera siempre que Josean Querejeta, el hombre fuerte en la toma de decisiones en el seno del Alavés, no diga lo contrario.
En este sentido, cabe recordar que el dirigente lazkaotarra ya decidió prescindir de los servicios del último técnico que logró el ascenso en Vitoria como José Bordalás al término del curso 2015-16. En su lugar, Querejeta escogió a Mauricio Pellegrino para dirigir al Alavés.
"Tengo contrato para la próxima temporada si subo. Para Segunda División no tengo oferta de renovación, sí tengo contrato en Primera y estoy a gusto aquí", ha subrayado Luis García, con una notable trayectoria a sus espaldas en Primera tras haber dirigido a clubes como el Mallorca, el Getafe, el Levante o el Villarreal.
El trabajo de Luis García hasta la fecha está siendo intachable, aunque no cabe duda de que la nota final dependerá de si el Alavés termina consiguiendo el gran objetivo para el que fue contratado. El madrileño le ha dado al equipo un sello de equipo sólido, disciplinado y compacto que compite en todos los partidos.
Tras los fichajes de Antonio Blanco y Asier Villalibre en el mercado invernal, no cabe duda de que la presión sobre los hombros de Luis García para cumplir el cometido por el que fue contratado es mayor si cabe.
Su momento más crítico en la capital alavesa llegó en diciembre con cuatro derrotas consecutivas, pero el madrileño de 50 años ha sabido revertir la situación hasta devolver recientemente al Alavés a los puestos de ascenso directo. Un lugar del que el cuadro albiazul ha vuelto a salir tras el empate ante el Cartagena en Mendizorroza.