Macedonia del Norte estudia retirarse de Eurovisión por lo que ha hecho su representante

Eurovisión es una máquina de generar noticias, sobre todo cuando se va acercando la fecha. Ensayos oficiales, pruebas de sonido y de vestuario, ruedas de prensa, apuestas y pronósticos varios.. Lo que no es habitual es que a menos de una semana de que el festival de la canción viva su noche más especial en Turín un país quiera retirarse por el comportamiento de su representante en la ceremonia de apertura del domingo.

Eso ha pasado con Macedonia del Norte. El país balcánico está estudiando seriamente si abandona el festival. Si bien está clasificado para tomar parte este jueves en la segunda semifinal, un gesto de Andrea, que compite con su canción Circles, ha llevado a la televisión pública macedonia (MRT) a plantearse esa drástica decisión y a parte del país a mostrar su indignación con su representante.

Y lo que Andrea hizo fue tirar una bandera de su país al suelo para posar ante los fotógrafos, algo que no gustó nada en Macedonia, como reflejó la cadena pública en un comunicado. "La MRT condena con fuerza el movimiento de nuestra representante en Eurovisión, que lanzó la bandera del país al suelo durante la sesión de fotos en Turín. La cadena pública no tiene nada que ver y no apoya este comportamiento escandaloso de nuestra representante en Eurovisión, que con ese gesto faltó al respeto al símbolo de nuestro país, lo que está penado por la ley", afirmó el ente público.

En ese comunicado, la MRT pedía una disculpa pública de Andrea por su comportamiento y anunciaba que están "estudiando la posible retirada de Eurovisión. Se tomarán todas las medidas legales para la sanción más estricta por este escándalo en la delegación macedonia". La disculpa llegó rápidamente y la cantante aseguró, en directo en los informativos nacionales de su país, que en ningún momento su intención fue maltratar a la bandera. "Los fotógrafos me pidieron posar sin la bandera. Nunca quise insultar a mi país", dijo. Habrá que ver si esas disculpas son aceptadas por sus propios dirigentes.