CADA día de carreras, Sophie Kumpen pone velas, reza por su hijo. La expiloto de karts unió su vida al expiloto de Fórmula 1 Jos Verstappen para años después dar a luz a uno de los grandes talentos del automovilismo: Max Verstappen (30-IX-1997, Hasselt). Las peticiones de Kumpen se vieron correspondidas en el Gran Premio de Abu Dhabi, donde su hijo fue impulsado por la fortuna para proclamarse campeón del mundo a sus 24 años.
Nacido en Bélgica pero con nacionalidad de los Países Bajos, Verstappen comenzó a competir a los siete años, en el karting, donde permaneció tres temporadas invicto. En este apartado se proclamó campeón europeo y mundial, lo que aceleró su debut en la F-1, que llegó en 2015 al volante de un Toro Rosso.
Su trayectoria ha estado marcada por la precocidad. A la condición de piloto más joven en debutar en la máxima competición –17 años y 164 días– sumó la de piloto más joven en subir al podio y en ganar un gran premio. Debido a su agresivo estilo de pilotaje fue apodado Mad Max, como el personaje de la película protagonizada por Mel Gibson. Trajo maniobras insólitas, momentos vibrantes. Espectáculo, en resumen.
En 2016 y después de solo cuatro carreras transcurridas, Red Bull decidió promover a su estrella emergente en lugar de Daniil Kvyat. Verstappen elevaría así su nivel de competitividad, encontrando el momento cúspide esta temporada, en la que con una conjunción de talento, agresividad y madurez ha sido capaz de dar fin a una era híbrida que comenzó en 2014 y que solo había visto reinar a los pilotos de Mercedes.
Red Bull ha puesto un gran coche sobre la pista. Pero cierto es que solo Verstappen ha sido capaz de tutear a Lewis Hamilton, un siete veces campeón de 36 años que corría por dejar atrás a Michael Schumacher en la cúspide de los récords.
Para conquistar el título ha necesitado unos números envidiables. Ha logrado diez victorias. Restando sus tres abandonos, el peor resultado del año ha sido una novena posición, propiciada por un accidente ocasionado por Bottas en Hungría; el resto de resultados han sido triunfos o segundos puestos. Después de 141 grandes premios disputados, aglutina 20 victorias, 61 podios, 13 poles y 16 vueltas rápidas.
Además, Verstappen ha llevado su rivalidad con Hamilton a cotas insospechadas, sobrepasando los límites. Este año ha recibido dos sanciones, mientras que Hamilton ha sufrido una. Si bien, la hilera de incidentes la inició Hamilton, cuando sacó de la pista a Verstappen en Gran Bretaña. En Italia, Max montó su Red Bull sobre el Mercedes de Lewis, recibiendo su primera sanción. Ya en Arabia Saudí provocó una embestida de Hamilton, por la que también fue sancionado.
Estos hechos no implicaron un gran desequilibrio, no fueron decisivos, como lo ha sido la furia de Mad Max, una personalidad irreductible, ambiciosa, atrevida, talentosa y apoderada de madurez que ha dado fin a una de las épocas de mayor dominación de la F-1. 2022 traerá un nuevo reglamento y podrá haber cambios en la jerarquía del Gran Circo, pero sin duda Verstappen será un piloto al que todos deberán vigilar.