Casi se pueden contar con los dedos de una mano las butacas que quedan libres. Lo cierto es que cada vez que el Mago Sun vuelve a casa y se sube al escenario del Principal, "el público responde de manera extraordinaria". Eso sí, detrás de eso no hay truco, sino mucho trabajo y ya una larga y premiada trayectoria, también en el ámbito internacional. Una carrera que vuelve a ponerse al servicio de los espectadores este domingo en el centenario teatro de la calle San Prudencio, donde Houdini, el mago del club se podrá ver desde las 18.00 horas.
Habrá números de grandes ilusiones, hipnosis, magia participativa... "y muchas sonrisas". Además, una persona del público será seleccionada para "desafiar a la ley de la gravedad" dejando al suelo del teatro a una considerable distancia. "Ante todo, buscamos sorprender y también emocionar", como pasará con el número final, en el que un tanque de agua cobrará protagonismo. Es, desde hace ya unos años, el número estrella de Iñaki Ruiz de Galarreta, un sello distintivo que le ha llevado a actuar en diferentes países.
"Tiene sus riesgos", sonríe el mago. Lo cierto es que su obligación es salir en menos de tres minutos de un tanque en el que se vierten 300 litros de agua. Todo ello, claro está, con parte del cuerpo inmovilizado. "Siempre puede pasar algo, eso no lo tienes que perder de vista, tampoco el público, pero es un número que tenemos muy trabajado". Será el broche final a una sesión sin respiro y lleno de sorpresas.
"Yo me lo paso pipa sobre el escenario" dice el mago, consciente de que al teatro acudirá gente "dispuesta a dejarse sorprender, pero también vendrán quienes quieran pillarnos; a esos les deseo suerte", ríe Ruiz de Galarreta, consciente de que estas personas "siempre terminan relajándose, olvidándose de su propósito y entrando en el espectáculo".
Desde la televisión
Recuerda el creador a aquel mago francés que vio en la Plaza Nueva cuando tenía 12 años. "Hizo desaparecer a una persona y volverla a traer pero con otra ropa; ahí pensé: quiero hacer esto". Dicho y hecho. Es imposible resumir en pocas líneas el currículum acumulado a lo largo de los años, paso incluido por la televisión de la mano del Club Houdini, de Disney Channel. A esta serie también hay unos cuantos guiños en el espectáculo que presenta en Vitoria ya que "me ha abierto la puerta a un gran público infantil y familiar".
La cita sirve además para que el creador e intérprete regrese al teatro de su ciudad natal tras cinco años de su última visita, un tiempo en el que incluso se ha pasado una pandemia. "Hubo que repensar muchas cosas e incluso ese trabajo fue interesante para replantear determinados números. Aún así, volver a la normalidad ha sido una explosión de alegría".
De hecho, él no para. Una nueva representación espera. "No me canso. O sí, pero los aplausos del público, la emoción que siempre me transmite, hace que quiera seguir actuando sin parar. Es lo que me llena de energía".