Muchos de quienes esta mañana hayan ido a repostar combustible, se habrán encontrado con problemas a la hora de pagar. En distintas estaciones de servicio, tanto de primeras marcas como de firmas de bajo coste, se han vivido largas colas o, directamente, los empleados han tenido que cerrar el acceso con conos para impedir el paso de vehículos. ¿La causa? Problemas en el software de cobro que se han prolongado durante dos horas y media.
Como explica a Onda Vasca Nuria Lekue, presidenta de la Asociación de Estaciones de Servicio de Bizkaia, Estaserbi, este tipo de problemas se vienen dando desde que empezó la bonificación de 20 céntimos por litro de combustible el pasado 1 de abril: "Ha sido complicado ajustar los softwares para la bonificación del Gobierno y, de vez en cuando, se bloquean y dan fallos".
Lamentan que las pymes del servicio se han visto con "una carga administrativa muy grande" desde que entró en vigor la medida, con "muchos problemas" a la hora de facilitar sus datos de facturación a la propia Administración y a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Lamentan también la imagen que dan ante el cliente "por una serie de infortunios que estamos sufriendo y ante los que no tenemos mano para poder arreglar".
Insisten en que comparten el fondo de la medida pero no están de acuerdo en la forma: "Por eso nuestra reivindicación de que se hiciera vía disminución de impuestos". Hay margen para reducir el impuesto de hidrocarburos, sostiene Lekue: "En el caso del gasóleo A, se reducirían 6 céntimos por litro y, en el caso de la gasolina, 13,7 céntimos por litro". De esta forma, sostiene, se rebajarían los precios de forma sencilla. En la misma línea, apunta a que la Administración también debería considerar otras medidas, como una reducción del IVA al estilo de la que ha llevado a cabo con la electricidad y el gas.