El Manga Barcelona abrió ayer las puertas de su 28ª edición en su nueva ubicación, el recinto Gran Vía de Fira de Barcelona, colgando el cartel de entradas anticipadas agotadas, confirmando así las expectativas de superar la cifra récord de 152.000 asistentes de 2019.
El salón ha dejado la sede de sus últimos diez años, en el recinto ferial de Montjuïc, en Barcelona, y se ha trasladado a tres pabellones del recinto de Gran Vía de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), para dar respuesta a la creciente demanda de visitantes y al auge de popularidad del manga.
Ahora regresa a la segunda ciudad de Cataluña consolidado como uno de las mayores convenciones de cómic y cultura japonesa de Europa. En la nueva sede, el salón dispone de 82.000 metros cuadrados de superficie global y cuenta con más expositores que nunca.
“Hemos abierto puertas ya con un récord de participación. El traslado a las nuevas instalaciones era para poder acoger a más gente y al haber agotado las entradas anticipadas antes de abrir, esto nos sitúa ya en superar los 152.000 visitantes, que fue la cifra récord que tuvimos en 2019”, explicó la directora del Manga Barcelona, Meritxell Puig.
Los aficionados que se hayan quedado sin entradas, sin embargo, aún tienen opciones de venir al salón, dado que la organización pondrá más a la venta a través de su página web a medida que el aforo de los visitantes por los tres pabellones lo permita.
El entusiasmo del público se palpó desde primera hora de la mañana, con visitantes abrigados con mantas que hacían cola desde antes de las 07.30 horas, esperando a la apertura de puertas de las 10.00 horas.
En este sentido, Puig destacó la “ilusión” y “ganas” de los aficionados al manga y la cultura japonesa, un público “maravilloso” y “entregado” que cada vez es más numeroso y transversal. “Las generaciones que crecimos con Bola de Dragón ya pasamos los 40 años y tenemos hijos, y obviamente a estos niños les encanta el mundo del manga”, señaló, y atribuyó el “boom” de la cultura nipona a la presencia de series de anime en las grandes plataformas audiovisuales. “Todos podemos ser grandes fans del manga”, remarcó Puig.
Esta nueva edición llega, además, con el esperado regreso de invitados japoneses, que a raíz de la pandemia todavía a día de hoy restringen sus viajes. Destacan los dibujantes de manga Nakaba Suzuki o la cantante Yoko Takahashi.
Durante los cuatro días de salón, el recinto ferial Gran Vía se llenará con una legión de otakus, muchos vestidos como sus personajes favoritos, dispuestos a disfrutar de todo el universo de la cultura japonesa.