"El verano es la época dulce para las manos”, afirman Pedro García y Ana Álvarez, masajistas y especialistas en las manos de los pelotaris. Hasta que llegó la pandemia del covid-19, en el estío afloraban las funciones como setas y el trabajo se multiplicaba para los pelotaris. La pandemia frenó la celebración de eventos de grandes multitudes y, con ellos, las fiestas patronales. Se cercenaron las ferias veraniegas y se redujeron los festivales. Después de dos campañas así, la presente está recuperando la alegría prepandémica en el frontón. Las herramientas de los pelotaris están aguantando el trote. Mano rima con verano.
“En estos meses pueden surgir problemas de piel. La mano suda más, los tacos se mueven más y pueden existir problemas de burbujas en las protecciones. Además, las piscinas, el cloro o los aditivos no es lo mejor que les puede venir. Evidentemente, la sobrecarga de partidos influye más que en invierno”, sostiene Álvarez, quien reflexiona que “la verdad es que en verano hay menos lesiones que en invierno”.
“ "En estos meses pueden surgir problemas de piel. La mano suda más, los tacos se mueven más y pueden existir problemas de burbujas en las protecciones" Ana Álvarez ”
“Siempre puede haber pelotazos malos o golpes en los dedos, pero casi todos los problemas estivales están relacionados con que se despegan las protecciones. El adhesivo no es el que era antes. Actualmente, casi todos son solubles al agua y el sudor los disuelve. La sudoración en los meses más frescos es mucho menor”, agrega García.
"El frío afecta mucho"
La leyenda del calor, positivo, y el frío, negativo, siempre ha impregnado la pelota profesional. Pedro lo aclara: “No diría que el calor le va bien a la mano, pero lo que tenemos claro es que el frío afecta mucho, que no es lo mismo”. “En invierno las manos están más frías y la circulación es menor. Se puede pensar que por el hecho de que, debido a que hace más frío, el cuerpo debe mandar más calor a la mano, pero hay órganos más importantes que necesitan ser calentados. La circulación, cuanto más distal es, más fríos se quedan manos y pies”, desvela Álvarez.
“ “No diría que el calor le va bien a la mano, pero lo que tenemos claro es que el frío afecta mucho, que no es lo mismo” Pedro García ”
Pedro García y Ana Álvarez tienen claro que la prevención es fundamental. “Siempre después de un partido se impone una buena higiene y quitar bien el adhesivo. Sobre todo, es primordial estirar bien los tendones y la musculatura del antebrazo”, manifiesta el masajista, quien admite que “a lo mejor en verano puede haber tres partidos, pero en invierno hay un partido y entrenamientos fuertes de frontón. Un ensayo nunca es tan potente como un encuentro, pero la frecuencia de juego estival es mayor, aunque no demasiado”. “El estiramiento posterior al partido empieza a preparar el próximo”, sentencia su compañera.
Los masajes
“Aspe lo tiene claro: el pelotari tiene que estar disponible y en las mejores condiciones”, cuenta el riojano, que pone en antecedentes: “Hay que aclarar que el mal de manos lo forman patologías distintas o la suma de varias de ellas. Siempre partimos de un proceso inflamatorio. Los estamos estudiando y seguiremos estudiándolos”.