Navarra

Manos solidarias y salud en el chupinazo de Lesaka

Con todas las fiestas por delante pero sin dejar de mirar de reojo a los dos años dejados atrás. El chupinazo reconoció la labor sanitaria y social.
De izquierda a derecha, Zeze Pereira, Sonia Salgado, Maripi Fagoaga, Itxasne Otxoteko, Beatriz Martinez y Rosa Alzugarai, antes del chupinazo.

El chupinazo de las fiestas de San Fermin se lanzó ayer con una mirada a estos dos duros años y el ayuntamiento quiso reconocer la labor realizada por diversos colectivos contra la pandemia. Concretamente, el centro de salud, con la médico Beatriz Martinez y la enfermera Itxasne Otxoteko, la residencia Andra Mari, con Zeze Pereira y Rosa Alzugarai y las trabajadoras sociales a domicilio Sonia Salgado y Maripi Fagoaga representaron a esos colectivos. Como señalaba Laura Apeztegia, directora de la residencia, “es un bonito y merecido reconocimiento y homenaje a la labor realizada durante la pandemia”.

De la misma opinión ere Ruth Gonzalez, directora del centro de salud de Lesaka, que afirmaba que “nos hace mucha ilusión, sobre todo a las Lesakarras, pero en general a todo el equipo que se siente reconocido por el esfuerzo realizado”. De la misma opinión eran Sonia Salgado y Maripi fagoaga, que comentaban que “estamos muy agradecidas y contentas, por que se valora y visibiliza nuestro trabajo. Somos siete trabajadoras, mas 3 en las sustituciones, que atendemos a 45 personas”.

Apeztegia comentaba que “somos 25 trabajadoras y 40 residentes y es imposible que subamos todas”. Tampoco Gonzalez quería personalizar el encendido del cohete, “todas nos sentimos reconocidas: medicas, enfermeras, fisioterapeuta, administrativas, trabajadora social, limpiadoras... También queremos agradecer al pueblo de Lesaka su ayuda, los voluntarios, realizar una mención especial a Begoña San Julián y al ayuntamiento, por todo el apoyo. También especial mención a los ciudadanos que nos han acompañado desde la plataforma de apoyo por la Sanidad Pública”.

Al preguntarles por los momentos mas duros de estos dos años, la directora de la residencia Andra Mari afirma que “la incertidumbre que vivimos al prinicipio. De un día a otro las personas residentes no podían salir a pasear, no podían estar con la familia, la sensación de falta de libertad, para las trabajadoras tener que adaptarse constantemente, día a día a las nuevas condiciones, el miedo a contagiarse y contagiar al de al lado, tener que utilizar en todo momento… fueron muchas cosas”. La directora del centro de salud también recuerda la incertidumbre inicial, “aunque en nuestra zona hubo pocos casos en la primera ola, lo peor llego en noviembre de 2020 con la entrada del covid en las residencias de ancianos de Bera y Lesaka. Pero gracias a la colaboración de todos pudimos organizarnos para atenderlos todos los días y reforzar las residencias. Después el otro momento difícil fueron los sanfermines del año pasado, por lo que supuso de más de mil contagios en una semana y la sobrecarga de trabajo para todo el equipo, en especial las enfermeras”. En ese sentido, afirma que “el riesgo sigue existiendo, pero los protocolos han cambiado, y al que se contagie se le atenderá como a cualquier otra infección vírica”. Para las trabajadoras a domicilio, la mayor responsabilidad ha sido “cumplir a rajatabla todas las medidas tanto para nosotras como para las personas usuarias, mantener bien las burbujas, siempre con los protocolos a vueltas. También les ha resultado duro no poder salir de sus casas…”.

Laura Apeztegia comenta que incluso durante la pandemia celebraron sus sanfermines “particulares” en la residencia, “con ayuda de las trabajadoras tuvimos chupinazo, encierro y mariachis. Este año los celebraremos de otra manera”.

MOMENTO CRÍTICO

Para el centro de salud, por su parte, los sanfermines son un momento crítico. Como recuerda Ruth Gonzalez, “no contamos con refuerzo, ya que no hay personal dispuesto a sustituir ni mucho menos a reforzar ni en medicina ni en enfermería. Tenemos que atender a toda la población de Bortiziak y además a la fiesta, pero sin contar con personal extra, por lo que solicitamos que todo el mundo acuda habiendo avisado antes al 112 para que se organice la demanda de la mejor manera posible. Son días festivos patronales para el centro el 7 y 8 y solo habrá servicio de guardia en Lesaka. El fin de semana también, como siempre. Contamos con la ayuda de la DYA que atiende en el centro del pueblo las urgencias leves, pero siempre hay un aumento de actuaciones el fin de semana. Los últimos años hemos visto un aumento de las agresiones derivadas del consumo excesivo de alcohol y drogas, pero sobre todo lo que atendemos son heridas y traumatismos”.

07/07/2022