El líder del PP de Castilla y León y aspirante a la reelección como presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha rechazado este martes formar gobierno con Vox, y ha avisado de que no dará "ni un paso atrás" en materia de igualdad entre hombres y mujeres.
En su discurso ante la Junta Directiva Autonómica del PP, Mañueco ha afirmado que no se plantea "lineas rojas" en las conversaciones que pretende iniciar con el PSOE y después con Vox y el resto de partidos, aunque ha fijado una serie de "grandes principios" que "no son negociables", entre los que ha incluido la igualdad, el modelo autonómico, la cohesión territorial, la integridad autonómica y la integración en Europa.
Fernández Mañueco ha reiterado que prefiere gobernar en solitario y ha dicho que el "gobierno fuerte y estable" que quiere "no tiene que ser necesariamente de coalición".
Mañueco ha insistido en el mensaje lanzado desde la noche del domingo, en el sentido de que interpreta los resultados -PP (31), PSOE (28) y Vox (13)- como un mensaje de los ciudadanos para que "gobierne el PP", aunque también "con diálogo", aunque ha avisado al partido de ultraderecha de que no es el momento de hablar "de sillones" y de que la situación actual no es comparable a la de 2019, como afirmó ayer su candidato, Juan García-Gallardo, ya que ahora el partido más votado es el PP.
El presidente autonómico del PP ha prevenido a los suyos del "ruido" externo y ha pedido aplicar "serenidad y tranquilidad", para mantener la "guía" en el "interés general" de los ciudadanos de Castilla y León "por encima de todo y de cualquier cosa".
Aunque ha reconocido que es necesario entender el resultado de las elecciones como un llamamiento al diálogo, ya que en caso contrario no irían "por buen camino", se ha mostrado convencido de que puede acometer este proceso de conversaciones con posibilidades de gobernar, aunque ha avisado de que el programa del PP es el que estará encima de la mesa como documento de referencia. "Y a partir de ahí hablaremos", ha resumido.
"No tenemos líneas rojas pero sí grandes principios", ha comenzado por decir Mañueco, quien ha añadido en primer lugar que "la igualdad no es negociable para el PP". "Si alguien piensa que el PP de Castilla y León va a dar un solo paso atrás en defender la igualdad social, laboral, de oportunidades entre hombres y mujeres se equivoca", ha planteado.
Del mismo modo, ha indicado que tampoco son negociables la cohesión territorial, la integridad autonómica y el modelo autonómico: "No vamos a ceder a chantajes de privilegios por votos entre unas provincias y otras, el que piense eso se equivoca".
Sobre el Estado de las autonomías, que cuestiona Vox, Mañueco ha alertado de que "si alguien piensa que podemos construir un proyecto al margen de estas ideas", sin "debilitar ni desmembrar" el país, también estará equivocado.
"La integración en Europa tampoco es negociable, si alguien piensa que en el PP de Castilla y León vamos a romper nuestros lazos europeos, con las vacunas, la PAC y las infraestructuras que vienen de Europa, también se equivoca de cabo a rabo".
Sin mencionar a Vox, pero con las palabras pronunciadas ayer por su candidato y por Santiago Abascal en la misma noche electoral como referencia, Mañueco ha expresado que "esto no va de sillones" ni de "hacer números", sino de hablar de "políticas concretas a favor de las personas".
Mañueco entiende que no tiene sentido "equiparar la situación de hoy con la situación de hace 3 años, porque quien ha ganado las elecciones es el PP", ha dicho en referencia a que Vox quiere hacer valer que tiene 13 escaños frente a los 12 que tenía Cs en la anterior legislatura, cuando contó con una vicepresidencia y 4 consejerías.
"Todas las hipótesis de gobierno pasan por el mismo sitio, por el PP de Castilla y León, y vamos a tener la inteligencia y la moderación para dar un gobierno a esta tierra", ha añadido Mañueco, quien se ha ofrecido para liderar este proceso "con templanza, con moderación y pensando en las personas de Castilla y León".
Se ha comprometido a hablar "con todos hasta la extenuación" para tratar de alcanzar un "gobierno sólido y estable": "Quiero un gobierno en solitario", ha apostillado Mañueco, convencido de que "un gobierno fuerte no tiene que ser necesariamente de coalición".
Para el candidato del PP es un gobierno en solitario el que "garantiza un gobierno fuerte, con un camino trazado y un pacto parlamentario sólido, claro y con conocimiento de todas las personas de Castilla y León".
En el mismo sentido, ha confiado en contar con un "gobierno con pilares firmes, sin medias tintas, sin trajes prestados y sin tener la espada de Damocles encima" para "encarar con decisión el futuro" de esta Comunidad.