Y al séptimo día, nada de descansar. Todo lo contrario. Las turbas se agolparán en las aceras y la música atronará al ritmo de HitzEkin!, la pegadiza canción de esta edición de Korrika que hoy miércoles tiene previsto voltear el callejero de Bilbao. Será a partir de las siete y media de la tarde, más o menos. Porque el ritmo de la multitudinaria carrera en favor del euskera lo marcan sus participantes. Sin prisa, tipi-tapa. Esta maratón, que arrancó hace una semana en Amurrio, entrará en el botxo en paralelo a la ría, desde Erandio, y saldrá por la orilla contraria, por Zorrotza después de haber recorrido 82 kilómetros, según estimaciones hechas desde AEK.
En total, cuatro horas pasaditas para completar un auténtico laberinto que recorrerá todos los distritos de la villa. Los relevos se irán sucediendo entre las 19.28 y las 23.48, horas previstas por la organización para el tramo capitalino. Las primeras galopadas, tan esperadas por la comunidad euskaltzale bilbaina (la pandemia obligó a suspender la edición programada para 2021, por lo que la última Korrika fue la de 2019) serán las más especiales por ese mismo motivo. Uno de esos primeros kilómetros, por ejemplo, llevará el sello de Fekoor, la Federación Coordinadora de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de Bizkaia.
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En realidad será medio kilómetro, desde el cruce entre la calle Aragón y Zarandoa, en el barrio de San Inazio. Este colectivo, habitual de esta fiesta popular, tampoco se ha querido perder esta 22ª edición y participará a iniciativa del grupo de berbalagun del centro de día Arbolarte, que portará el testigo a favor del euskera y el mismo tiempo reclamar una sociedad inclusiva en la que se apueste de forma decidida por la diversidad.
De Deusto a los barrios altos
Eso será pasadas las siete y media de la tarde, y poco antes de las ocho de la tarde le tocará el turno a la Universidad de Deusto, desde el cruce Francesc Macià con Botika Vieja a la Universidad. Y de ahí por Tiboli hacia los barrios altos del botxo. Porque la carrera no para. Puede que se ralentice su ritmo debido a la muchedumbre y el ambiente festivo, pero jamás se detiene como ha quedado patente con las nevadas y las tormentas que han zurrado a los participantes de jornadas previas. Vueltas y revueltas para llevar el euskera a todos los puntos de Santutxu, Txurdinaga, Otxarkoaga...
Será pasadas las diez de la noche, o como se entienden en Korrika en el kilómetros 1.620 de carrera, cuando Bilboko Konpartsak revolucione el Casco Viejo. Será en la plaza Unamuno, a eso de las 22.10 horas. Bea Server e Itxasne Núñez, pregonera y txupinera respectivamente de Aste Nagusia, portarán el testigo de Korrika. Y así, tras pasar por Cortes y San Antón, y reencontrarse con las Siete Calles, la carrera conectará con la Casa Consistorial donde el alcalde, Juan Mari Aburto tomará el relevo. La previsión que maneja la organización de esta multitudinaria carrera en favor del euskera apunta a las 22.26 horas. Y junto al primer edil estará Koldo Narbaiza, concejal de Euskera y Educación, y otros cargos de la corporación municipal.