Marcelino García Toral abandona el Athletic sin morderse la lengua. El asturiano, relevo de Gaizka Garitano en el banquillo de San Mamés en enero de 2021, dirigió el pasado domingo en el Ramón Sánchez Pizjuán su último partido como entrenador rojiblanco. Lo hizo con derrota y sin poder materializar una anhelada clasificación europea que tampoco alcanzó la pasada temporada y que ha dado paso al anuncio de su adiós al conjunto bilbaino tras 75 partidos a sus espaldas como timonel rojiblanco y un balance de 29 victorias, 25 empates y 21 derrotas con 31 futbolistas utilizados.
Visiblemente emocionado y con dificultades para contener las lágrimas en la rueda de prensa de despedida que ha ofrecido junto a Aitor Elizegi en La Catedral, donde también asomaron su cuerpo técnico, el capitán Iker Muniain en representación de la plantilla, José Ángel Iribar, varios miembros de la junta directiva del club y Rafa Alkorta en calidad de director deportivo, Marcelino ha querido dejar claro el motivo de su salida.
UNA GUERRA
En su discurso inicial, antes de responder a las preguntas de los periodistas, el asturiano aha asegurado que "es evidente que si hubieran continuado los dirigentes que nos contrataron y que nos permitieron trabajar con absoluta libertad, habríamos aceptado continuar, pero me voy porque siento que el club no me da ya la confianza que necesito".
"No me ofrece el apoyo para construir algo a medio y largo plazo. En estas últimas semanas no he percibido el interés inequívoco, ni la confianza a futuro para seguir siendo entrenador del Athletic Club. Estos argumentos nos han servido para confirmar que habíamos acertado al no aceptar la prórroga del contrato que se nos ofreció en varias ocasiones", añadió Marcelino, quien asegura asimismo que "he tenido una guerra, no una batalla, entre el corazón y la cabeza. El corazón me decía sigue, pero la cabeza no puedes".
LA MEJOR DECISIÓN, VENIR AL ATHLETIC
"El Athletic está muy por encima de las personas que puntualmente estamos en él y, después de hacer un análisis profundo de la situación con el equipo técnico que me acompaña y de analizar los pros y los contras, creemos que ha llegado el momento de dar un paso al lado y cerrar una bonita historia. Estamos orgullosos de haber disfrutado del privilegio de disfrutar del Athletic Club. Ha llegado el momento de dar las gracias y decir adiós. Eskerrik asko y agur. Dos palabras que en Euskera son tan usuales y que esta vez tienen un significado especial para nosotros", lanzó el de Villaviciosa en una multitudinaria comparecencia en la que también afirmó que "el mejor momento para mí en el Athletic fue en el que decidí venir y el peor, en el que decidí irme".
LOS PRECANDIDATOS
"Estoy convencido de que el equipo continuará mejorando. El trabajo, la credibilidad y el cariño que nos ha mostrado la plantilla durante estos 17 meses ha sido increíble y nos sentimos muy unidos a ellos, porque este grupo es el mejor con el que hemos trabajado en mis veinte años como profesional", agrega Marcelino, quien apunta, a pesar de las razones que le han impulsado a salir del Athletic, que no está molesto con los precandidatos a la presidencia del club.
Con Jon Uriarte ni siquiera ha hablado "al tener ya tomada nuestra decisión y no dar tiempo". "No estoy dolido con ellos y no creo que me hayan faltado al respeto en absoluto. Pensaba que esta situación podía producirse y era la más normal al tener que medir mucho cada paso que das para intentar ser presidente del Athletic, así que mi máximo respeto. Esto es fútbol y tenemos que entender que la persona que elige puede escoger entre multitud de posibilidades para ser entrenador del Athletic", reflexiona el de Villaviciosa. La decisión de poner el punto final a su estancia en Bilbao, que la tomó unos días antes del partido en el Pizjuán, "me duele en el alma", ha dicho el asturiano, toda vez que "la afrontamos con mucha pena, porque es difícil para un cuerpo técnico disfrutar tanto en el día a día como hemos hecho aquí".
LA PLANTILLA
Agradecido a la plantilla, así como a la junta directiva de Aitor Elizegi y a la afición, Marcelino hizo su última reflexión sobre la exigencia en torno al Athletic al resaltar que "estar luchando por entrar en finales y llegar a Europa con esta filosofía tiene un mérito increíble y a veces en Bilbao se puede olvidar, pero vosotros los periodistas, que vais cada quince días por todos los estadios, podéis escuchar que lo que está haciendo el Athletic tiene muchísimo valor, si bien pudimos hacerlo mejor y somos los primeros que nos lo exigimos siempre".
SOBRE RAÚL GARCÍA
En cuanto a los mensajes de apoyo que ha recibido en las últimas fechas por parte de pesos pesados del vestuario como Raúl García, quien llegó a asegurar que su marcha supondría un "hándicap" para el equipo, Marcelino, que afirmó que su futuro pasa por "hacer la mudanza e ir a Gijón a intentar disfrutar de mi familia y los amigos", admitió que "las palabras de Raúl se las agradecí personalmente, como al resto de compañeros, porque muchos futbolistas se manifestaron en la misma línea y en lo único que no estoy de acuerdo con él es en que mi marcha es un hándicap".
NUEVO ENTRENADOR
"Sería muy presuntuoso y estaría fuera de lugar dar algún consejo al nuevo entrenador, pero le deseo todo lo mejor y seguro que encuentra las soluciones para hacer un Athletic mejor", finalizó el preparador asturiano, pasado ya en el Athletic.