Navarra

Marcha para reivindicar el derecho a educar, vivir y trabajar en euskera en las escuelas infantiles

La marcha, a su paso por la calle Chapitela.

Padres y madres de las escuelas infantiles (haur eskola gurasoak) han celebrado este jueves una concurrida manifestación para reivindicar su derecho a "Educar, vivir y trabajar en euskera en las escuelas infantiles", como reza el eslógan de la marcha. La marcha ha salido desde la plaza del Ayuntamiento y ha concluido en el Parlamento de Navarra.

"No hay más que echar un vistazo al mapa de la distribución geográfica de los modelos lingüísticos de las escuelas públicas infantiles para darse cuenta de la exclusión que sufre el euskera en estos distritos. Las vecinas y los vecinos del suroeste (barrios de Mendebaldea-Ermitagaña, Etxabakoitz, Iturrama y Donibane) y del sureste (barrios de Arrosadia, Lezkairu, Ensanche, Mendillorri y Erripagaina) no tienen oferta de inmersión en euskera. ¿Alguien puede justificar tener 4 modelos de inmersión en castellano en el mismo distrito y ninguno en euskera? Exigimos al menos un modelo de inmersión en cada distrito, ¡basta ya!", explican los convocantes en un comunicado.

Un único modelo de inmersión

Recuerdan que existen "un único modelo de inmersión entre las 16 escuelas infantiles de Pamplona. La oferta en euskera, además de zonificada y escasa, está mayoritariamente ofertada en modelos mixtos, donde la inmersión real no se da. En este tipo de modelos el castellano se sobrepone y se entorpece la transmisión del euskera. Muchas veces parece que los y las que pedimos el euskera en modelo de inmersión lingüística estamos pidiendo ciertos privilegios, pero no es así. Estamos reclamando la herramienta más eficaz para la supervivencia y extensión del euskera, como lengua navarra, a otros ámbitos. ¡Porque queremos vivir en euskera!".

"Defienden el equilibrio entre oferta y demanda de euskera pero sin oferta, quieren reducir el número de educadoras y educadores con perfil de euskera para luego usarlo como excusa a la hora de ampliar las plazas en euskera, no han desarrollado un proyecto lingüístico y de normalización para la rama en euskera, no han analizado arquitectónicamente las necesidades lingüísticas de las escuelas infantiles, no ha habido debate lingüístico y pedagógico,€ Es un desastre, y hacen marketing de él diciendo que es un modelo de convivencia, igualdad e inclusión ¡Es suficiente!", añaden.

Trabajadoras de las 0-3

Por su parte, las trabajadoras de las escuelas infantiles han censurado que "se inventaron un modelo lingüístico 'castellano con actividades en inglés', con el único fin de frenar el avance de otro modelo, la inmersión lingüística en euskera. Y a pesar de que este modelo inventado no ha sido avalado por ningún experto en la materia, sino que muy al contrario, ha recibido muchísimas críticas en cuanto a su idoneidad, este Ayuntamiento, ha seguido apostando e invirtiendo en él, haciendo creer a la ciudadanía que se trata de un derecho y una necesidad de la infancia".

"En un momento en el que lo más lógico hubiera sido invertir para preparar a los y las profesionales que trabajamos en el 0-3, para poder afrontar toda la compleja casuística que se nos viene encima, en apoyar y cuidar a quienes atendemos en la primera línea a criaturas y familias, el excelentísimo Ayuntamiento de Pamplona-Iruña, ha decidido invertir en que las y los trabajadores de sus escuelas infantiles saquemos el título B1 de inglés...", argumentan.

"Cuando se han dado cuenta de que ni siquiera este experimento era capaz de frenar la creciente demanda de escuelas con modelo de inmersión lingüística en euskera, su obsesión euskarafóbica les ha llevado a dar un paso más y se han sacado de la manga una nueva versión del tratamiento de las lenguas... "euskera con actividades en inglés". Ahora tratan de convencernos de que todo lo hacen por la modernización de nuestras escuelas, cuando no pueden disimular su euskarafobia", afean.

Por último, explican que "tras 15 años sin haber sacado una sola plaza a oposición pública, van introduciendo el perfil de B1 de inglés en todos los puestos, creando entre las y los trabajadores la "necesidad" de formarse y obtener esta titulación, a todas luces insuficiente para poder enseñar una lengua, si quieren poder optar a poder opositar a una plaza de educador/a infantil. (Pero esto no es imposición de un idioma, sino una oferta adecuada a las demandas de formación del personal...)".

17/12/2021