Alavés

Margen para reaccionar

Análisis
MARGEN PARA REACCIONAR

Cero puntos en el casillero y colista de la clasificación tras la disputa de las tres primeras jornadas de Liga. Un escenario lo suficientemente claro como para no admitir demasiados paños calientes y que, desgraciadamente, tiene al Deportivo Alavés como protagonista. Un inicio en las antípodas de lo soñado por los seguidores albiazules al que ahora se añade el aplazamiento del duelo de la cuarta jornada ante el Villarreal, impidiendo al Glorioso romper esta mala dinámica. Con este panorama, DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA ha querido pulsar las sensaciones de cuatro incondicionales de la escuadra de Mendizorroza. Pese a reconocer abiertamente los muchos y graves problemas exhibidos hasta ahora, todos mantienen la confianza y se muestran convencidos de que aún existe margen suficiente para la reacción.

"Me gustaría pedir a la grada PACIENCIA, porque se está trabajando en cambiar totalmente la mentalidad del equipo. Se lleva tanto tiempo siendo un equipo defensivo que, incluso, está dentro del ADN alavesista. Calleja necesita tiempo para trabajar, y me consta que trabaja mucho y muy bien. No hace ni quince días del cierre de mercado y hay jugadores que aún tienen que interiorizar conceptos. Vamos a sufrir mucho, más de lo que estamos habituados, pero ese sufrimiento merecerá la pena. Acabaremos, si la dirección deportiva tiene paciencia, disfrutando mucho del juego. Incluso de los resultados, estoy seguro. Este año seguiremos luchando por la salvación pero lo lograremos de manera holgada y el año que viene, lucharemos por otros objetivos, llegaremos a soñar", vaticina con optimismo Yeray Cuesta.

La ilusión que acompaña a este joven socio que ahora sigue al Glorioso desde Dublín –y sueña con poder pisar pronto de nuevo Mendizorroza– no le impide resaltar, sin embargo, las muchas aristas que aún presenta el plantel. "Cada partido de pretemporada me emocionaba más que el anterior. Sabía que el estreno ante el Madrid iba a ser complejo, y ocurrió un poco lo que me esperaba. Un buen juego que, por físico y alguna ayudita innecesaria, acabaría con derrota. Lo peor ha vendo con los siguientes partidos. Un equipo que no se parecía nada al de la pretemporada", expone.

Los destellos del verano –"llevaba la iniciativa del juego, sin depender tanto de lo que el rival plantea y su objetivo no era tanto defender sino atacar... algo que llevábamos esperando mucho tiempo"–, sin embargo, se apagaron. "Por desgracia, esa faceta defensiva que tantas alegrías nos ha dado, se ha debilitado mucho hasta el punto de ser nuestro flanco más débil", lamenta.

Un diagnóstico con el que coincide el que fuera entrenador del Deportivo Alavés Emilio Quílez. "La situación es mala porque quitando la primera parte ante el Madrid que nos encandiló a todos el equipo ha dado muestras de tener muchos problemas, sobre todo una gran fragilidad defensiva. Lo está demostrando jornada tras jornada y es lo que más me preocupa. El rival hace media ocasión y es gol. Laguardia no es el que era por diferentes motivos, los laterales tampoco y vamos a esperar las aportaciones que puedan hacer Lejeune y Miazga pero de momento es lo que más me preocupa", desvela.

Sensaciones Igualmente preocupado por el arranque de curso del Glorioso se encuentra Javi Muro. "El inicio ha sido muy malo, creo que peores sensaciones no se pueden ver en un campo de fútbol. Los tres primeros partidos han sido muy malos en general. Exceptuando 45 minutos contra el Real Madrid el resto ha sido francamente muy malo. Pienso que el equipo a día de hoy no tiene ninguna identidad. Calleja no tiene tampoco las ideas muy claras, ha cambiado las alineaciones, ha hecho variaciones bastante sorprendentes y tenemos problemas clarísimos en defensa con fallos impropios de la categoría. Defendiendo el equipo no funciona, el centro del campo no genera prácticamente nada y, evidentemente, cuando no se crea los de arriba poca labor pueden hacer", reflexiona el que fuera jugador albiazul.

Para Muro, la infección no se limita únicamente a la retaguardia, sino que ha colonizado todo el cuerpo "Pienso que tenemos problemas en todas las líneas, no hay ninguna en la que hayamos visto algo positivo. Algunos minutos buenos de Manu García y poquito más. De los nuevos no sabemos nada porque seguimos funcionando con el once de las dos últimas campañas. Por eso el futuro pasa por que la gente nueva, que tal como los venden y yo también lo creo son refuerzos, tiene que estar preparada para dar el salto de calidad al equipo. Esperamos que su incorporación lo aporte, nos saque de apuros y veamos un Alavés más reconocible", desea.

Una ilusión por acceder a la obligada reacción que necesita el equipo que comparte Emilio Quílez, aunque ambos advierten del peligro de jugar demasiado con fuego. "Mantenemos la esperanza pero la pelota está rozando el larguero mucho las últimas temporadas y un día va a pegar en él. Esperemos que no y que el Alavés tenga los suficientes medios y futbolistas para arreglar la situación pero se está viendo cómo los demás equipos se están reforzando y aquí se ha apostado por los chavales. Se ha ido Lucas Pérez –que es verdad que no estaba aportando mucho rendimiento– y pienso que el equipo tiene menos pólvora y defensivamente presenta muchos problemas", apunta el técnico.

"Al nivel que está el equipo el margen de mejora es amplísimo, enorme, y eso es lo que esperemos que consigan los refuerzos. Pero si tenemos que estar mucho tiempo con la plantilla que casi nos lleva al descenso los dos últimos años, que es la que prácticamente ha jugado los tres partidos, pues vamos a pasarlo mal. Sería tener un riesgo brutal hasta el final de la temporada", avisa el exintegrante de la plantilla.

Suele decirse que la experiencia es un grado y a ella recurre José Manuel Salán para mantener su confianza en las posibilidades del equipo. "Vamos a ir muy por detrás pero es una situación que ya hemos vivido antes y esperemos que el equipo la vuelva a levantar. Lo primero es defender bien, es fundamental. Aunque sea jugando cinco atrás y cuatro adelante. Y hay que hacerlo de inmediato ya, en casa contra Osasuna", sostiene el fiel acompañante del Glorioso en todos sus desplazamientos.

El que fuera árbitro durante muchos años introduce además dos asuntos interesantes en el debate. Por un lado el aforo de Mendizorroza. "Tienen que dejarnos entrar a todos al campo, porque competimos en inferioridad con otros equipos", advierte. Y, por otro, los huecos significativos que presenta el vestuario de Mendizorroza. "Se nota que se haya ido Manu García Sánchez. Manu García Alonso ha venido y habrá que ver si aguanta cinco temporadas en Primera División como lo hizo el capitán. Hay mucha gente que hablaba mal de él pero yo noto mucho su ausencia, por lo que hacía en el césped y fuera del campo entre semana", señala.

Donde José Manuel Salán coincide plenamente con sus colegas de análisis, es en señalar a la retaguardia como la principal vía de agua en la actualidad. "En la parte de atrás es donde peor les veo, para mi es la zona más floja del equipo. Parece que estamos muy, muy de pretemporada todavía", argumenta.

También Javi Muro abre el abanico de su discurso a sendos factores que sin duda tienen una incidencia directa en el rendimiento del grupo. "La moral es bastante justita y en cuanto nos meten un gol, como pasó contra el Madrid, el equipo se desmorona radicalmente y pasa a ser una marioneta. Aparecen los fallos en todas las líneas y es un desastre, se ve un grupo incapaz de remontar", arranca. Y enlaza esta situación con el hecho de no disputar el duelo de la cuarta jornada contra el Villarreal. "Es verdad que es pronto para sacar conclusiones pero el inicio es malo y la pena es que al no jugar esta semana vamos a seguir en el fondo de la clasificación y eso va a implicar que nos va a costar bastantes semanas salir de la zona baja de la tabla que tiene que ser nuestro objetivo para tener un pequeño margen y quitarnos de nervios y sensaciones malas", advierte.

Emilio Quílez, por su parte, trata de encontrar una lectura positiva a la rocambolesca situación en la que se ha visto envuelto El Glorioso. "Que no se juegue lo primero que me parece es un cachondeo. Por lo demás, te da margen para trabajar. Ha habido muchas incorporaciones de gente nueva y esto va a permitir coger las características que Javier Calleja quiere que tenga el equipo, que no hay que olvidar que le llevaron a mantenerse en Primera División cuando parecía una utopía", recuerda el colaborador de este periódico.

Guidetti El antiguo entrenador gasteiztarra saca a la palestra, además, dos nombres propios de la plantilla. "Hay un caso curioso. Guidetti ha pasado de defenestrado a ser el hombre que tiene que salvar la situación, y pienso que no es ni una cosa ni la otra. Con Munir formó una gran pareja ofensiva, después por lo que sea cayó en desgracia o su fútbol no tenía el nivel para jugar en el Deportivo Alavés y si ahora queremos que sea el salvador lo veo complicado", reflexiona sobre el papel del delantero sueco en este proyecto.

El otro es el del que, en principio, parece destinado a llevar la batuta del nuevo Alavés. "Manu García quizás es el que más ha demostrado los brotes verdes que pueda tener el equipo pero a todo el grupo le veo con muchas carencias de momento", detalla.

Y enlaza esta idea con una reflexión sobre el modelo de equipo que se ha diseñado para el ejercicio actual. "Vamos a ver si los chavales dan un paso adelante pero creo que se ha vendido una moto demasiado descarada con lo de que se había apostado por los jóvenes y se había formado un equipo de futuro. Porque la Primera División tiene otra historia y necesita gente con experiencia, con callo, bragada...", advierte alertando sobre la bisoñez de la escuadra del Paseo de Cervantes. "Perder contra el Madrid o contra el Valencia de Don José (Bordalás) entra dentro de lo normal porque a pesar de los problemas que tiene conserva un gran potencial pero lo que tú no te puedes permitir es perder contra el Mallorca. Por lo menos tienes que empatar porque ahora ya arrastras un déficit importante", precisa.

Por último, Yeray Cuesta introduce un último tema en el debate, que entronca directamente con la configuración de la plantilla y el rendimiento que pueda ofrecer. "En cuanto a los temas económicos, no entiendo nada y por eso no hablaré al respecto. Simplemente, creo que el club debería ser más transparente y explicar todo como si fuéramos tontos, ya que la mayoría no entendemos de esos temas", reclama.

Los aficionados albiazules coinciden, en definitiva, en calificar con un indiscutible suspenso el arranque de liga protagonizado por el Deportivo Alavés pero también en que, afortunadamente, hay por delante margen para reaccionar.

13/09/2021