Con las campanadas que emitieron simultáneamente Cuatro y Telecinco acabó el periplo de Mariló Montero en Mediaset, donde que se sepa ya no tiene ningún compromiso ni ningún proyecto en mente. Unas campanadas que no pasarán a la historia por la audiencia lograda, que fue escasísima comparada con la de Antena 3 y TVE, pero sí por el desafortunado comentario de su compañero, Risto Mejide, contra sus rivales de la noche, Cristina Pedroche y Ana Obregón.
Aunque estaba previsto que la estellesa siguiera unos meses más como copresentadora de Todo es mentira, su adiós se ha precipitado, porque Marta Flich, a quien sustituyó desde el 18 de octubre por su maternidad, ha retornado tres meses antes de lo que se preveía. La valenciana, que fue madre en noviembre a sus 44 años, ha decidido acortar su baja porque, según ella afirmó el lunes al retornar al programa de Cuatro, “tenía muchas ganas de volver”.
76 días han pasado desde que nació su hija Berta hasta que ha regresado al plató. Un tiempo en el que ha sido sustituida por una mujer con un perfil tan diferente (sobre todo en lo ideológico) como Mariló Montero, que ha sido trending topic en varias ocasiones por sus opiniones sobre diferentes temas. Una vuelta que Risto Mejide celebró con emoción.
En cualquier caso, la navarra va a seguir apareciendo en televisión, porque el próximo viernes 13 de enero se estrena la tercera edición de El Desafío, en la que es una de los ocho concursantes. Un programa que se emite en la competencia, en Antena 3, pero que ella grabó antes de que Mediaset la eligiera para sustituir a Marta Flich.