El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha recordado este martes en el Senado que en 2018, cuando gobernaba el PP, se celebraron 38 'ongi etorri' (homenajes a etarras) en Euskadi y Navarra, mientras que a día de hoy, solo ha habido uno. Marlaska ha respondido así en el pleno de la Cámara Alta al senador de UPN, Alberto Catalán, quien ha pedido al ministro que actúe ante dichos homenajes a ETA, y le ha reprochado que aún no haya cumplido la promesa de reformar la ley para castigar estos actos.
"Me comprometí a hacerlo de forma realmente sólida para que no admita ninguna crítica formal por tribunales tanto nacionales como europeos, que nos debemos a ellos", le ha respondido Marlaska para dejar claro que la reforma pase el filtro de la justicia.
"Estamos trabajando jurídicamente aunque es muy difícil establecer un texto específico porque el derecho administrativo sancionador también se nutre de los principios del derecho penal", ha añadido el ministro.
Por su parte, el senador ha recriminado al Gobierno que esté "blanqueando a Bildu", y ha preguntado a Marlaska que si ha modificado la ley que impide rezar delante de una clínica abortiva o la que sanciona el enaltecimiento del franquismo, "¿por qué no hace lo mismo para que no se ensalce el terrorismo de ETA?".
Marlaska ha asegurado que "un simple acto de homenaje a un terrorista ya es demasiado para una sociedad democrática que acabó con el terrorismo y que afrenta a las víctimas" y ha citado las medidas que el gobierno de Pedro Sánchez ha puesto en marcha para honrar la memoria de estas.
En concreto, el ministro se ha remitido a la Directiva 2017/541 que modifica el ámbito de tipificación de los hechos de naturaleza terrorista para, en lo que respecta al enaltecimiento, "exigir que exista un riesgo concreto y evidente de que un hecho delictivo de esa naturaleza pueda ser cometido".
SIGUEN TRABAJANDO EN LA REFORMA
El titular del Interior ha recordado que la Audiencia Nacional se vio "abocada a modificar su jurisprudencia" después de que ETA abandonara las armas. La reforma para impulsar este régimen sancionador fue defendida por Grande-Marlaska tras los diferentes fallos judiciales que limitaron las actuaciones por la vía penal contra actos de enaltecimiento y humillación a las víctimas, de ahí que defendiera activar la "vía administrativa" como el mecanismo adecuado.
"Estamos trabajando jurídicamente, pero es muy difícil según todos los servicios jurídicos del Ministerio poder establecer un texto concreto y específico, porque el derecho administrativo sancionador también se nutre de los principios del derecho penal", ha reconocido.
No obstante, el ministro ha dicho que "siguen trabajando" porque "un solo hecho de esa naturaleza es una afrenta que un Estado de derecho no puede soportar".