Marta Pombo, una de las influencers más queridas, ha vivido una de las experiencias más intensas y emocionantes de su vida tras el nacimiento de sus hijas mellizas, María y Candela. Sin embargo, lo que debería haber sido un momento de pura felicidad se ha visto marcado por un agridulce matiz: mientras que María ha recibido el alta médica y ya está en casa, su hermana Candela sigue ingresada en el hospital. Este momento ha sido difícil para Marta y su familia, quienes a pesar de su alegría por estar con María, no ocultan la tristeza de no poder llevar a ambas pequeñas a casa.
La propia Marta ha compartido con sus seguidores, a través de redes sociales, los detalles de este complicado proceso, explicando lo duro que ha sido dejar el hospital sin Candela. Aun así, la influencer y su marido, Luis Zamalloa, mantienen una actitud optimista y confían en que pronto toda la familia esté reunida.
El difícil regreso a casa solo con una de sus hijas
Este miércoles, Marta Pombo anunciaba que ella y su hija María ya se encontraban en casa, tras haber recibido el alta médica. En una tierna publicación, presentó por primera vez a la pequeña María, vestida con un encantador body de punto rosa. Sin embargo, la alegría de estar en casa se vio empañada por el hecho de que su otra hija, Candela, sigue en la incubadora. Aunque ambas mellizas nacieron en buenas condiciones, los médicos han decidido mantener a Candela en observación por precaución.
Marta compartió con sus seguidores la dificultad de regresar a casa sin Candela, explicando: “No sabéis lo difícil que ha sido irnos a casa solo con una de nuestras hijas”. A pesar de esta situación, la influencer mantiene la esperanza de que pronto podrán tener a las dos niñas juntas en casa. "A Candela siguen haciéndole algunas pruebas por precaución y va a seguir ingresada. Ojalá estemos los cinco en casa pronto", comentó con emoción.
Por su parte, Luis Zamalloa también expresó su alegría y tristeza simultáneas en un vídeo, donde mencionó que Matilda, su hija mayor, ya ha conocido a su hermana María y la ha recibido con mucho cariño, llenándola de besos. "Es una monada de niña", dijo con orgullo, refiriéndose a la recién nacida. A la espera de la recuperación total de Candela, la familia se apoya en la tranquilidad de saber que su evolución sigue dentro de la normalidad.
Un verano lleno de emociones: escapada a Euskadi y vacaciones en Cantabria
A lo largo de su embarazo, Marta Pombo y Luis Zamalloa disfrutaron de varios momentos en familia, entre los que destacan su escapada a Euskadi y sus vacaciones en Cantabria, justo antes de la llegada de sus hijas. Estos momentos fueron clave para que la pareja pudiera relajarse y prepararse para el gran cambio que supondría la llegada de sus mellizas.
La escapada a Euskadi fue una de las últimas salidas que Marta y Luis realizaron antes de que su embarazo entrara en la recta final. Ambos compartieron momentos de paz y disfrute, alejados del ajetreo de la ciudad y rodeados de la tranquilidad de la naturaleza. Para Marta, estos días fueron esenciales para desconectar y recargar energías antes de lo que sabía sería un intenso parto.
Posteriormente, la familia pasó unas semanas en Cantabria, donde disfrutaron de la costa y de la compañía de familiares. Las vacaciones fueron una oportunidad para que Marta disfrutara de su embarazo rodeada de sus seres queridos, y aprovechara los últimos momentos de calma antes de que sus dos nuevas hijas llenaran su hogar de alegría.
El nacimiento de María y Candela estaba previsto para finales de septiembre, sin embargo, como suele suceder en muchos casos de embarazo múltiple, las niñas llegaron de manera prematura. El 30 de agosto, Marta anunció a sus seguidores que había roto aguas, un mes antes de la fecha prevista. Días después, el 1 de septiembre, Luis Zamalloa daba la feliz noticia desde el hospital: "Familia, estamos fenomenal. Ha salido todo genial", dijo en un mensaje lleno de emoción.