La Mesa del Pacto Vasco de Salud, en la que participan el Gobierno vasco y los principales agentes del ámbito sanitario, político y social de Euskadi, se reúne este miércoles por cuarta vez para debatir la reforma del sistema sanitario. Al inicio del encuentro, el consejero de Salud, Alberto Martínez, ha recordado la aprobación del diagnóstico el pasado 30 de octubre como un “hito relevante” y ha mostrado su agradecimiento “a todas las partes” antes de presentar el nuevo texto con la visión, los valores y los principios propuestos para Osakidetza.
Martínez ha destacado, en primer lugar, la visión “aspiracional al tiempo que realista y muy nuestra” de la nueva propuesta que el Gobierno vasco ha llevado a la reunión. Se trata de un enfoque que “conecta con el potencial del sistema” sin dejar de lado el diagnóstico acordado y con una proyección de futuro “a medio-largo plazo”.
Como segundo pilar, el consejero ha resaltado los valores, “universales” y alineados con los derechos humanos. En palabras de Martínez, este aspecto “es lo que corresponde a una sociedad como la nuestra, una sociedad europea”.
El tercer punto son los principios “más apegados a la realidad de la sociedad vasca”, que serán la guía para las estrategias que se definan a partir de enero. El consejero entiende que “solo podrían ser traídos” a Osakidetza, un sistema que es “universal en algunos aspectos, pero singular en muchos otros”.
Según Martínez, el pacto “avanza y toma cuerpo”, pero lo más importante es que los pasos que se toman sean “compartidos” entre los agentes participantes y “sólidos” para poder “avanzar de manera conjunta”. De esta manera, el consejero enfatiza en la necesidad de “trabajar bien” en esta fase para abordar en enero de 2025 las estrategias, para las que ve “rigor, ilusión y compromiso”.