Un total de 2.526 personas fallecieron en Euskadi en 2023 mientras esperaban a ser valoradas por el sistema de dependencia o a que se les asignara algún tipo de prestación o servicio.
Son datos de la última evaluación del Observatorio Estatal de la Dependencia de la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales con la información oficial del Imserso, que muestra las desigualdades entre comunidades tanto en coberturas como en modelos de gestión.
El año pasado había en Euskadi 15.047 personas en una situación de dependencia real esperando ser atendidas, lo que supone un aumento del 5,3 % con respecto a 2022 y sitúa la tasa de espera en el 13 %.
En el conjunto del Estado había 231.079 personas en esta situación, un 10,7 % menos interanual, con lo que la tasa de espera es del 14 %.
Tiempo medio de tramitación de un expediente: 140 días
El tiempo medio de tramitación de un expediente en el ámbito estatal es de 324 días, 20 menos que en 2022. Por normativa, el plazo máximo para resolver un expediente se sitúa en seis meses (180 días), pero solo hay cuatro comunidades por debajo a ese margen, entre ellas, Euskadi, con 140 días.
La comunidad más ágil en este sentido es Castilla y León con una media de 127 días y la más lenta Canarias con 647 días.
En cuanto a las personas que ya han sido valoradas y están a la espera de recibir una prestación o un servicio -el llamado 'limbo de la dependencia'- Euskadi está entre las regiones con peores registros, con un 17,9 %, solo por delante de Canarias (26,1 %), Catalunya (19,4 %) y muy lejos de las autonomías con mejores datos: Aragón (2 %), Navarra (3,9 %) y Madrid (4,3 %).
Además, en el País Vasco la situación es "especialmente preocupante" porque a esa "alta tasa" se añade que en el último año el 'limbo de la dependencia' ha aumentado un 5,3 % en la comunidad autónoma.
El gasto público en Euskadi, por encima de la media estatal
El gasto público por población potencialmente dependiente alcanzó en Euskadi los 1.553 euros en 2023, una cantidad superior a los 1.305 euros de media en el Estado.
En función de los distintos baremos analizados el Observatorio Estatal de la Dependencia otorga una nota a las comunidades autónomas. Las mejores valoradas son las dos Castillas con sendos 8,3, la media estatal es de 5 y la nota de Euskadi se sitúa en el 4,4.
La valoración vasca sube con respecto al informe anterior, cuando se quedó en el 3,8, pero es la segunda cifra más baja de los últimos 15 años.