Más de 286.000 hectáreas han ardido en el Estado español en lo que va de año por los incendios, según datos del Sistema Europeo de Información de Incendios Forestales (EFFIS) a 19 de agosto, del programa Copernicus de la Unión Europea.
De este modo, el Estado (con 286.418 hectáreas) se sitúa a la cabeza de los países con más superficie calcinada este verano, seguida de Rumanía con 149.172 hectáreas arrasadas.
Por su parte, a fecha de 7 agosto, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) cifra en 168.738,63 las hectáreas de superficie arrasada por los incendios forestales.
Estos datos pasan de triplicar la media de hectáreas quemadas en la última década (54.381 hectáreas) y no incluyen, además, la superficie quemada en los grandes incendios registrados en las últimas dos semanas como el de Bejís (Castellón) que permanece aún sin control y ha calcinado unas 19.000 hectáreas según la Generalitat o el de Vall d'Ebo (Alicante), que ha calcinado 12.150 hectáreas de terreno, según el Consorcio Provincial de Bomberos de Alicante.
Los datos del MITECO reflejan que hasta el 7 de agosto de este año ardieron 168.738,63 hectáreas frente a las 44.566,28 hectáreas del mismo periodo de 2022 y 54.381 hectáreas quemadas de media en los últimos diez años.
Estos resultados sitúan a 2022 como el peor de los últimos diez años, superando con creces ya a 2012, hasta el momento el peor año de la última década, en el que hasta la fecha se habían quemado 157.455,93 hectáreas en un total de 25 grandes incendios. En lo que va de año, los servicios de extinción de incendios han tenido ya que trabajar en la extinción de 43 grandes incendios.