El último fin de semana de enero se presenta muy invernal, con más nieve, lluvia y cielos grises. Las precipitaciones en forma de nieve llegarán en torno a los 300-400 metros. Será necesario abrigarse, ya que, según las previsiones, los termómetros no superarán los 5-6 grados. No será hasta el lunes cuando el mercurio comience a subir y se sitúe en los 10 grados. Este viernes la cota podría bajar en la segunda mitad del día hasta los 400-600 metros tras situarse en los 600-700 a primeras horas y los espesores de nieve estar entre los 2 y 15 centímetros a los 1.000 metros y alcanzar los 5 centímetros a los 600.
Para el fin de semana, zonas como los parques naturales de Urkiola y Gorbea seguirán cubiertos de un manto blanco. A medida que vaya avanzando la jornada del sábado , la cota de nieve rondará los 400-500 metros y, el viento, soplará con intensidad.
El domingo las temperaturas caerán en picado, con mínimas de 1 grado y máximas de 7, y la cota de nieve también bajará hasta los 200 metros
Las nubes continuarán siendo abundantes y se darán algunas precipitaciones a lo largo de la jornada matinal. La lluvia irá remitiendo por la tarde y se podrán ver algún claro.
La nieve se convierte en una oportunidad para hacer planes en familia y este fin de semana sin necesidad de acudir a ninguna estación de esqui. Esta jornada también se prevén heladas débiles en el interior, especialmente en zonas de montaña.