El Ayuntamiento de Pamplona debería ser ejemplar en la transición hacia la movilidad eléctrica y garantizar el proceso de desarrollo que lo haga posible, con la ampliación de los puntos de recarga, más carriles bicis y con un servicio de bicicletas eléctricas que alcance a toda la Comarca.
Estas son algunas de las conclusiones que se extrajeron de la celebración de la segunda reunión de la Mesa de la Movilidad Eléctrica de Pamplona, una iniciativa que impulsa el Ayuntamiento junto a la empresa que gestiona el sistema de recarga para turismos eléctricos, Vilalta.
Durante la sesión de trabajo de la Mesa de la Movilidad Eléctrica –de la forman parte 30 entidades, centros tecnológicos y empresas, incluida Diario de Noticias– se identificaron los principales retos para la transición hacia la movilidad eléctrica y las líneas de trabajo para hacerlo posible.
En concreto se plantearon cinco ideas para desarrollar: infraestructuras y espacio urbano; nuevo modelo de movilidad; comunicación y sensibilización ciudadana; coordinación e integración; y el papel del Ayuntamiento.
Con respecto a la infraestructuras, los participantes identificaron como medida prioritaria la realización de un estudio sobre las necesidades reales y actuales en materia de infraestructuras. Se trata de conocer el volumen de usuarios que disponen en estos momentos de vehículos eléctricos, así como potenciales interesados en su adquisición.
Infraestructuras necesarias
Tras el desarrollo de esta medida se considera oportuna una primera aproximación para identificar el tipo y cantidad de infraestructuras que se precisen, teniendo en cuenta también el espacio público necesario.
En este sentido se propone aplicar una mirada específica sobre las realidades de los diferentes barrios de Iruña.
Estas dos medidas señaladas con anterioridad se consideran prioritarias y se identifican también otras posibles acciones como unificar en una misma aplicación los servicios disponibles para la ciudadanía en materia de movilidad y ofrecer incentivos a las empresas privadas para que pongan a disposición de sus plantillas, en los espacios de parking, el uso de cargadores eléctricos.
El carril bici del Labrit, abierto parcialmente.
Entre las acciones propuestas destacan la instalación de puntos de recarga, hubs de movilidad eléctrica, carriles bici para toda la ciudad, aparcamientos para bicicletas y ampliar el sistema de bici eléctrica por la Comarca.
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Con respecto al nuevo modelo, la Mesa considera prioritario lograr un consenso entre las formaciones políticas para “definir y concretar el modelo de movilidad al que se desea aspirar para después aterrizar la hoja de ruta que permita alcanzarlo, paso a paso”.
Una oportunidad para Pamplona
Se manifestó también la oportunidad que supone para una ciudad como Pamplona acoger experiencias piloto transferibles a otras ciudades en materia de movilidad eléctrica y sostenible, poniendo de manifiesto que Navarra es una comunidad autónoma pionera en vehículos eléctricos.
Sin duda, uno de los retos que más interés y debate suscitaron fue lo relativo a la coordinación e integración de los sistemas. La interoperatividad y la intermodalidad se perciben como elementos fundamentales para garantizar una evolución del paradigma actual hacia un ecosistema atractivo y funcional, donde la movilidad eléctrica sea el núcleo.
De esta manera, se hizo patente que ambos aspectos actualmente tienen altas limitaciones: la interoperatividad es muy escasa actualmente y la intermodalidad tiene mayor capacidad de desarrollo.
Puntos de recarga para vehículos eléctricos
Otro elemento central lo constituyen las infraestructuras, fundamentalmente los puntos de recarga que garanticen una solución efectiva a la carga para las personas que no disponen de garaje, y en un plano más amplio que no concierne ya a Pamplona en particular, para garantizar la plena operatividad de los viajes de media y larga distancia con coche 100% eléctrico.