Tras dos años sin que Olentzero recorriera las calles de Tudela ayer sus vecinos y vecinas desbordaron las expectativas y acudieron en masa para ver cómo recorría buena parte del Casco Antiguo de Tudela. El buen tiempo de la noche del 24 en la Ribera propició que miles de tudelanos acudieran a recibir a Olentzero que, debido a la pandemia, algunos pequeños ni siquiera lo habían visto pasear por la ciudad, por los dos años de ausencia.
Arropado por miles de niños y familias, participaron diversos grupos de animación como el colectivo Laya o los gaiteros, además del habitual Zanpantzar y varios carros y grupos de dantzaris que animaban su marcha.
Los txikis habían recibido a Olentzero en los locales de la peña Beterri, donde le habían entregado las cartas de última hora. La comitiva contó con más de 200 personas que acompañaban al protagonista de la noche hasta la plaza de Los Fueros donde el coro Tutera Kantuz le ofreció varias canciones.
También otras localidades riberas recibieron la visita del carbonero como Castejón, Corella, Fustiñana o Buñuel, entre otros.