Después del paso ayer de Ana Curra y Nitxos, Hell Dorado vuelve a la carga esta noche con otra doble propuesta, aunque en un tono un tanto diferente. En el particular infierno de la capital alavesa se verán las caras con el público el norteamericano McKinley James, y con los vizcaínos Santiago Delgado y Los Runaway Lovers.
Como suele ser habitual en el espacio de Venta de la Estrella, las puertas se abrirán a las 21.00 horas, quedando todavía algunas entradas disponibles. Les tocará abrir fuego a Santiago Delgado y Los Runaway Lovers, que a mediados del año pasado editaron Bilbao, su nuevo disco. “Viejo rock and roll de toda la vida, enraizado profundamente en los clásicos de los 50 y los 60”, pero “con ramificaciones a todo lo que nos gusta posteriormente”. Así explicaban al Grupo Noticias, antes de actuar en el Music Legends Festival de 2022, a qué suena su propuesta.
En este trabajo “hay un poco de todo, pop-doo wop, nuggets garajeros, swingbilly, power pop, punk pop con vientos, nuestro primer instrumental y mucho rock’n’roll, tanto que hasta hemos incluido nuestra propia y chirene historia del rock”. Así lo podrán comprobar quienes acudan esta noche a Hell Dorado.
Tras ellos será el turno para McKinley James, que está en plena gira estatal para presentar su último trabajo, el EP Still Standing By. El joven guitarrista norteamericano desplegará ese sonido en el que se encuentran el blues, el rock y el country. Justo antes de la pandemia, el intérprete realizó su primera gira por estos lares, aunque la situación sanitaria ha obligado a que se haya tenido que esperar más de lo que esta previsto para reencontrarse.
En aquel primer tour, el músico no pasó por el infierno de Venta de la Estrella, algo a lo que se le va a poner remedio esta misma noche. De esta forma, Hell Dorado y McKinley James podrán conocerse por fin. Son muchas las miradas puestas en él puesto que todavía es muy joven –ronda los 20– pero está demostrando una capacidad y un talento que está llamando mucho la atención. Habrá que ver si su paso hoy por Vitoria es el primero de muchos.