La huelga convocada por todos los sindicatos del comité de empresa de Mercedes Benz en Vitoria ha parado la producción de la planta por tercer día este mes de junio.
El pasado día 22 se celebró la primera jornada de paro en 20 años en la factoría, la mayor de Euskadi con casi 5.000 puestos de trabajo directos y que a través de empresas auxiliares mantiene a otros 30.000 indirectos.
A esta jornada de huelga, que tuvo un seguimiento del 95 % según los sindicatos y del 75 % según la dirección, le siguió la que convocaron este miércoles ELA, LAB y ESK, que hablaron de la misma cifra mientras que la empresa reconoció un seguimiento "masivo".
La huelga de este jueves, convocada unitariamente por todos los sindicatos, ha comenzado en el turno de mañana con la paralización total nuevamente de la producción, por lo que hoy tampoco saldrá de la factoría ninguno de los cerca de 700 coches que se suelen ensamblar cada jornada, han informado fuentes sindicales.
Estas fuentes han vuelto a cifrar el seguimiento del paro en un 95 % de las líneas de producción y han explicado que, en líneas generales, solo han acudido a trabajar los eventuales.
A primera hora de la mañana se han concentrado piquetes en las entradas de la factoría, sin que se haya producido ningún tipo de incidente, según han confirmado a Efe fuentes de la Ertzaintza.
Estas jornadas de huelga se enmarcan entre las movilizaciones que los sindicatos están llevando a cabo en demanda de mejoras en el convenio colectivo y para mostrar su rechazo a la pretensión de la dirección de la empresa de aumentar la flexibilidad con la implantación de una sexta noche de trabajo.
Para la próxima semana ya está convocada otra jornada de huelga el día 6 de julio, que coincide con la reunión que va a celebrar el lehendakari, Iñigo Urkullu, y su consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, en Stuttgart con directivos de Mercedes Benz para hablar de los proyectos que esta multinacional tiene para Vitoria.
La dirección de la multinacional alemana vincula la firma del nuevo convenio con la posibilidad de hacer una inversión en la planta de Vitoria de 1.200 millones de euros que posibilitaría la modernización de las instalaciones y duplicaría su capacidad de producción.
Además de la jornada del día 6, ELA, LAB y ESK tienen intención de convocar otras dos días de huelga los días 7 y 8 de julio. Para intentar que la convocatoria de estas dos jornadas vuelva a ser unitaria estas centrales hablarán con el resto de sindicatos del comité, este viernes o el próximo lunes.
Además, para hoy estaba prevista una reunión de la dirección de la empresa con el comité para hablar de la previsión de producción de la próxima semana, una reunión que los representantes de los trabajadores se han negado a mantener al ser una jornada de huelga.
Varios miles de trabajadores de la planta han participado en la manifestación conjunta con el resto del sector del Metal de Álava que se ha celebrado en Vitoria.
Una "lección" a la empresa
El presidente del comité de empresa, Igor Guevara, ha dicho que en la jornada de huelga de este jueves la plantilla ha vuelto a dar una "lección" al demostrar que tiene ganas de "movilizarse en contra de la propuesta de la empresa".
Guevara ha reclamado a la dirección de Mercedes que se siente a negociar porque si no lo hace "es complicado llegar a un acuerdo" en torno al convenio.
Sobre las declaraciones del lehendakari, Iñigo Urkullu, en las que mostraba su preocupación por la situación de conflictividad laboral en Mercedes, ha dicho que le parece estupendo que "haga lo que esté en su mano para intentar que se solucione, pero de ahí a plantear que debemos rebajar nuestras condiciones laborales o tener que ver menos a nuestros hijos va un trecho".
Ha dado a conocer que el próximo lunes se reunirá el comité de empresa para ver si es posible una convocatoria conjunta de huelga de todos los sindicatos los días 7 y 8 de julio, o si esta se queda solo en una movilización de ELA, LAB y ESK.
A este respecto se ha referido Roberto Pastor, de CCOO, quien ha considerado que la plantilla demanda actuaciones unitarias para forzar a la dirección de la fábrica a que retome las negociaciones de convenio.