El periodista y aventurero Miguel Gutiérrez regresa a la capital de Ucrania en un momento en que todo indica que esta guerra que comenzó hace 11 meses se va a perpetuar en el tiempo. "La gente de Kiev se ha acostumbrado completamente a la guerra. Siguen con su vida", afirma Miguel a pesar de que hay más apagones y bombardeos que la última vez que estuvo en la ciudad.
Sus ciudadanos resisten y siguen confiados en que esto acabará y que ganarán a Rusia pero reconoce el portavoz de Eutsi Ukrania que su sensación es de "mayor pesadumbre" que en otros viajes.
Y es que hay muchos niños huérfanos en casas de acogida, personas mayores que han quedado sin nada y cementerios plagados de jóvenes soldados muertos. "Está desapareciendo toda una generación. Es terrible", lamenta.