Miguel Lorente: "Que haya bajado el número de suicidios entre los homicidas machistas se debe a que no perciben tanto rechazo social"

Han pasado 18 años desde que se aprobara la ley integral contra la Violencia de Género y acabamos de dejar atrás un año con 49 mujeres asesinadas y diciembre como peor mes de toda la serie histórica. Y el comienzo de 2023 es completamente descorazonador con 4 mujeres asesinadas en tan sólo 24 horas. 

El ex delegado del Gobierno contra la Violencia de Género en el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, Miguel Lorente recuerda por ello que el problema es nuestra concepción como sociedad de todo lo que tiene que ver con las relaciones de pareja y el papel que juegan hombres y mujeres basada en el sometimiento de ellas hacia ellos.

"Hay 600 mil mujeres que sufren violencia y 43% son conscientes de que la sufren pero no denuncian porque no lo ven suficientemente grave", señala. Desgraciadamente no es una realidad de las generaciones de más edad sino que esta concepción continua entre los jóvenes. 

"Un 15,4% de chavales menores de 25 años creen que si la violencia es leve no es un problema. Por lo tanto lo ven admisible. El problema es grave siempre", subraya. "Cuando le dices quítate la falda o no hables con tal chico, es grave siempre. No es el resultado el que determina la acción sino la acción en sí misma", añade. 

Pero finalmente todo se reduce a cómo entendemos nuestra sociedad y al papel que jugamos cada uno de nosotros ante la terrible realidad que tenemos delante. 

"Si no te posicionas, permites que continúe. El barómetro del CIS dice que menos del 1% considera que asesinar a 60 mujeres al año es un problema grave. Si esto es así, no vamos a poder cambiar esta circunstancia", afirma Miguel Lorente que actualmente imparte clases de medicina legal en la universidad de Granada. 

"Las estrategias de los agresores se basan en la normalidad y la aceptación. Si no hacemos algo, contribuimos a que siga", insiste. 

No sólo denunciar

Después de 18 años con la ley integral, sólo denuncia 25-30% de las víctimas. "Si la sociedad un día llega a ser consciente y crítica como para que el porcentaje de denuncias alcance el 80% ese día no existirá la violencia de género porque se habrá roto con la normalidad", afirma. "El 80% de las asesinadas no ha denunciado nunca. Este año ha sido 60% porque un 40 sí había denunciado y es terrible", reconoce. 

Miguel Lorente pone el foco precisamente en acompañar no solo a las mujeres que denuncian sino que insiste en que es necesario trabajar también sobre las que no denuncian y están en riesgo. 

En este sentido ve bien que se cambie el protocolo respecto al sistema vioGen y a advertir a las mujeres que comienzan una relación sentimental que sus parejas tienen antecedentes por violencia machista. "Es una buena medida pero de impacto limitado. Va dirigida a los casos que se denuncian y dentro de esos, a los que reinciden. Todo lo que sea actuar ahí es importante pero el impacto sobre el problema global es limitado", señala.

Por eso considera importante poner el foco en ellos y que sean ellos los que asuman consecuencias. "Tienen que soportar ellos el peso. Son hombres que deciden actuar de forma violenta. Poner el foco en el agresor es lo que hay que hacer", afirma.

Un ejemplo es las pulseras telemáticas. Recuerda Miguel Lorente que "ningún homicidio se ha producido con la pulsera". Por tanto, subraya que ha cumplido su propósito. Por eso, en su opinión, deberían usarse más e incluso plantear si ante situaciones de riesgo deben usarla las policías.

Y es que cuando no hay denuncia es complicado que la policía pueda actuar. "Sin denuncia es difícil pero sí se puede desde el espacio sanitario, desde los servicios sociales y con la fiscalía y actuaciones prejudiciales", enumera y considera fundamental tener capacidad de actuación sobre el agresor antes de que se inicie la actuación policial.

Además, añade, hay que ser realistas. "Me encantaría que la mujer lo primero que hiciera denunciara pero eso no va a ocurrir. Tenemos dos opciones. O esperar a que denuncien o asumiendo que eso no va a pasar darle una respuesta", resume. "La denuncia llegará cuando se vean protegidas o hayan superado sus miedos", añade.

No perciben rechazo social

Pero el problema principal sigue siendo nuestra visión de esta lacra y las justificaciones ante las conductas machistas que aún persisten. De ahí la importancia del rechazo al agresor y un dato lo demuestra. En la estadística vemos que ha bajado el número de suicidios de los agresores tras cometer el asesinato y eso se debe explica el profesor Lorente, al menor rechazo social.

"Cuando bajan esos suicidios tras el homicidio es porque no perciben tanto rechazo social, que van a entender por qué lo han hecho. Supone una reacción muy negativa de la sociedad. Debemos ser conscientes de que esa reacción social está presente", sentencia.

Recuerda además que después de que llevamos 18 años con una ley integral la estadística actual no tiene sentido. "Si se producen no es por casualidad sino que hay factores causales. Cuando eso ocurre, significa algo" y en este aspecto pone el acento en los mensajes negacionistas. "El cambio social crítico con las políticas de igualdad alimenta esa reacción crítica", señala.

Miguel Lorente aboga por desarrollar políticas adecuadas al momento actual desde la educación a la detección precoz. "No podemos mantenernos pasivos. No podemos esperar a que la situación sea más grave para actuar", concluye.