Continúa maldita la Itzulia. Gafada. Después del drama de Olaeta, la competición sigue contando víctimas. No hay paz para los ciclistas. En esta ocasión, Mikel Landa, que estaba completando una buena carrera apoyando a Evenepoel, dejó la prueba, que se queda huérfana de ídolos.
El alavés se cayó en Mañaria, antes de encarar la subida a Urkiola. Como consecuencia del fuerte impacto, Landa, que mostró evidentes síntomas de dolor sobre el asfalto, tuvo que ser evacuado en ambulancia.
Aunque consciente, fue inmovilizado con un collarín cuando le metieron en camilla al vehículo sanitario camino del hospital. La exploración determinó la fractura de clavícula. Más adelante se decidirá si es intervenido o no.
También Gonzalo Serrano y Gelders, compañero de Landa en el Soudal, tuvieron que salir de la carrera como consecuencia de la caída.