Polideportivo

Mikel Landa: "Sueño con estar en el podio del Giro"

Mikel Landa comenzará el curso el próximo sábado en la Strade Bianche, una clásica que le servirá para ir costruyéndose de cara al Giro, su objetivo principal
Mikel Landa encara el próximo Giro con ganas de hacer podio.
Mikel Landa encara el próximo Giro con ganas de hacer podio. / Wout Beel & Cédric Depraetere

“Me gustaría volver a levantar los brazos, tener esa sensación”, dice Mikel Landa (Murgia, 13 de diciembre de 1989) antes del inicio de la campaña, centrada en volver al podio del Giro, que pisó en 2015 y 2022.

“Es una carrera especial para mí”, sostiene el de Murgia, que está en conversaciones con su actual equipo, el Soudal, para seguir con ellos al menos la próxima campaña. Veterano aunque plenamente vigente, el alavés, quinto en el Tour del pasado curso, no piensa en la retirada.

¿Cómo ha ido la pretemporada? 

–Ha sido muy tranquila y muy larga. Quizás de las más largas que he tenido nunca. Casi siempre acababa en Lombardía y esta vez acabé en el Mundial. Empiezo en Strade Bianche, ya en marzo. Así que he tenido mucho tiempo para desconectar y para cargar las pilas otra vez. Además no he tenido ninguna lesión ni ningún tipo de contratiempo. 

¿Necesitaba una pretemporada de este tipo? 

–No sé si la necesitaba o no, pero la verdad es que no me quejo. He tenido mucho tiempo para estar en casa y disfrutar de la familia. Ahora toca ponerse manos a la obra con las concentraciones, las carreras y demás.

¿El hecho de que haya descansado más de lo normal implica que le cueste activar más el cuerpo?

–Un poco sí. Además, no tengo 25 años. Sí que se nota un poco más eso de sufrir y exprimirse tanto.

¿Cómo llega al debut del curso? 

–Llego bien, pero la Strade es una prueba dura, muy exigente. Para ser la primera carrera del año no va a ser fácil, pero es una carrera que no he corrido nunca y quiero tener esa toma de contacto. Además, en el Giro hay sectores de tierra también. Si va bien, disfrutaré, y si no, el lunes siguiente empieza Tirreno. Mi idea es empezar un poco en progresión. Tengo un reto bastante ambicioso con el Giro y Tour y el objetivo es tener el pico de forma en el Giro. La Strade la correré a modo de ensayo para ver cómo voy en tierra. Es una carrera bonita, pero muy dura. No es una carrera mala del todo para los escaladores y no será fácil, pero si hago unos sectores de grava entre los mejores, estaré contento.

Será su primera carrera, pero ya todo el mundo va muy rápido. 

–Sí, desde el principio todo el mundo va volando. Para algunos esa carrera será un objetivo importante porque ya llevan varias pruebas encima.

Después de tantos años en el profesionalismo, ¿cómo se motiva uno ante el comienzo del curso?

–En mi caso, cambiando un poco el calendario. Hacía tiempo que no estaba en el Giro y es una carrera que me encanta. He decidido volver y me motiva especialmente estar allí. Strade es una carrera que no he corrido nunca y que me atrae. Luego corro Tirreno. En Tirreno tengo dos podios, pero es una carrera complicada porque las diferencias son pequeñas. La contrarreloj me suele perjudicar y será difícil estar delante este año, pero bueno, con un final en alto nunca se sabe. Después voy a Catalunya. Son carreras que me traen buenos recuerdos y luego tengo el foco puesto en el Giro. Tengo la ilusión puesta en el Giro y luego, en el Tour.

Para usted el Giro es especial. Una carrera que le ha dado mucho.

–Fue en el Giro donde me descubrí y es la carrera que mejor se me puede adaptar por las grandes montañas, los grandes puertos y una última semana que siempre es complicada. Es una carrera que me enganchó desde el principio. Tengo grandes recuerdos del Giro y vuelvo con muchas ganas. Este año estoy pensando mucho en el Giro. Las etapas tienen mucho desnivel. Quiero ir in crescendo al Giro. 

¿Cuál será su objetivo en el Giro? 

–Siempre he estado haciendo generales. Te mentiría si te dijera que no lo voy a intentar. Vamos a soñar con estar en el podio. Me gustaría volver a ser un corredor que puede ganar alguna etapa. Intentaré ganar alguna etapa y estar enganchado en la general.

Da la impresión de que este año el Giro parece menos exigente. 

–No sé. Creo que todo el mundo está subestimando el Giro. Es una carrera que siempre ha sido dura. No sé qué tiene, si son las etapas largas, los traslados, que es como más lento, pero acumulas mucha fatiga para la última semana. Es otro tipo de cansancio. Aunque no estén todos los puertos míticos, hay puertos duros y quizás las etapas de montaña están más concentradas que otros años. Lo veo bastante exigente, sobre todo, la última semana. Cuando acumulas ese cansancio y ves los perfiles de la última semana ya no te parece una carrera tan fácil.

¿Quiénes serán los favoritos para ganar la carrera? 

–Están Roglic, Adam Yates y Ayuso. Esos tres son los grandes máximos favoritos. 

Hace unos años plantearse el doblete Giro-Tour era una locura. ¿Cuál es su idea para la carrera francesa?

–Mi idea es apoyar a Remco. Espero que llegue en gran condición. El año pasado, después de la caída en la Itzulia, llegó con más prisas, pero mi idea es volver a pelear con él por el podio. 

¿Qué valoración hace de su año al lado de Evenepoel? 

–Creo que nos hemos entendido bien desde el principio y le he aportado cosas dentro y fuera de la carretera. Creo que le he aportado tranquilidad, sobre todo. Creo que ha aprendido a delegar un poquito y confiar. Es una persona con mucha presión y responsabilidad, la que él mismo se mete, y carga con todo el equipo a la espaldas y es justo lo contrario de lo que tiene que hacer. Tiene que aprender que los demás trabajen para él y no tener que resolver él todas las situaciones problemáticas que se den en carrera. En ese sentido sí creo que le he dado tranquilidad.

¿Echa de menos levantar los brazos? 

–Sí, lo que más. La verdad es que es complicado ganar. Hay gente rapidísima, gente rematadora que se especializa en fugas. Casi siempre intento disputar las etapas en los días marcados para la general, pero siempre te encuentras con un Pogacar, con un Vingegaard, con un Roglic… La verdad es que es muy difícil.

Si le dieran a elegir entre otro podio en el Giro o ganar dos etapas en la carrera italiana y no hacer podio, ¿con qué se quedaría?

–No lo sé. Tengo como esa adicción a las generales. He hecho dos veces podio en el Giro. Sería muy grande subir de nuevo al podio. Pero ganar dos etapas sería algo muy, muy divertido. 

¿Tiene intención de ir al Mundial?

–Me atraen dos cosas del Mundial. Una, que sea tan duro; y otra, que se corra en África. He visto imágenes del Tour de Ruanda y es una pasada cómo se vive. Tanta gente me recuerda a cuando la gente se acercaba a ver la Vuelta hace muchísimos años por aquí. Sí que me gustaría estar. Me gusta casi más el ciclismo de antes que el de ahora.

Mikel Landa durante la pasada Vuelta.

Mikel Landa durante la pasada Vuelta. Efe

Aún no ha empezado a competir, ¿pero qué impresión le está dando este comienzo de campaña? 

–Que nadie perdona. Ninguna novedad. Se está siguiendo en la línea de los últimos años. Hay gente muy buena ya en forma y grandes dominadores del pelotón ganando sus primeras carreras. Todo el mundo está con el cuchillo entre los dientes ya.

¿Existe una presión extra en ese sentido?

–Te cansa un poco mentalmente. Antes ibas a las carreras y se vivían momentos de tranquilidad. Se disputaba sobre todo el final. Había días claves en los que sabías que se iba a ir rápido, pero te permitía hacer horas y hacer kilómetros, pero ibas más tranquilo. Ahora, desde el primer kilómetro vas sufriendo y piensas, con lo bien que estoy en casa y aquí me meten las gomas desde el principio. Además, en estas carreras de principio de temporada parece que la gente va a apretar todos los días, a saber hasta dónde pueden llegan. Están además los segundas espadas que tratan de alcanzar las victorias lo antes posible porque después les toca trabajar para un líder. A veces se hacen más duras que la Itzulia, Catalunya o Tirreno. Yo personalmente sufro más en Andalucía o Valencia que en una carrera del WorldTour de una semana.

¿Tiene intención de renovar con el Soudal, su actual equipo?

–Estoy contento en el equipo, estamos hablando y mi idea es seguir. Me siento valorado y estoy disfrutando otra vez. Intentaré seguir con ellos.

¿Piensa en la retirada o es algo que no le preocupa en absoluto?

–No me quiero obligar tampoco a dejarlo o a seguir. He tenido la suerte de disfrutar de mi carrera y estoy a buen nivel. Luego ha llegado el Tour y he sido quinto. Ha sido el Tour en el que menos he sufrido. Al acabar la temporada sí que piensas, otra vez otro año, pero luego coges aire, descansas y estas con ganas de hacer dos. Lo que tengo claro es que iré año a año, pero no me voy a obligar a dejarlo en una fecha concreta. Es verdad que sí pesan mucho los días fuera de casa, sobre todo cuando tienes familia. Te cuestionas mucho más si merece la pena, pero también creo que puedes encontrar un equipo con el que puedas hablar: hago menos concentraciones, hago más carreras. Creo que puedes exigir un poco y adaptar el calendario.

¿Qué ha encontrado en el Soudal? 

–Llevaba cuatro años en el Bahrain y estaba bastante quemado. Cambiar de aires es lo que me ha hecho volver a tener esa alegría. No tanto por el hecho de cambiar el rol de líder, eso no me pesaba, como el de cambiar de ambiente. He pasado de estar siempre en equipos que miraban las carreras de tres semanas y se centraban en hacer generales, a uno que solo piensan en el día a día. Eso hace que te relajes y te motiva.

¿Un equipo así encaja mejor con su personalidad? 

–No es eso. Creo que son momentos de la vida. Si hubiese llegado a este equipo con 25 años pues igual algunas cosas me hubiesen quemado. He llegado en buen momento. He valorado muchas cosas y creo que he acertado.

¿Qué le parece que la UCI haya decidido limitar el uso del monóxido de carbono? 

–Me parece bien. Por lo que dicen puede ser algo peligroso utilizándolo sin un control médico. Así que me parece bien.

¿Qué opina sobre Pogacar? 

–En el uno contra uno creo que Pogacar no tiene rival. Vingegaard en el Tour le puede plantar cara, pero fuera del Tour no puede con él. El tío es supercompleto. Es capaz de ganarte Flandes y luego el Tour, subir como el mejor… La verdad es que en el uno contra uno es muy superior al resto. Luego, el equipo que tiene está a tope. De momento no hay sorpresas. Veremos si el Visma puede darla.

¿Queda 'dictadura' Pogacar para largo?

–Parece que sí. No da la impresión de que nadie que venga por detrás pueda plantarle cara. 

Usted ha estado cerca de él en algunos momentos. ¿Cómo se ve desde dentro esa superioridad?

–Tú estás al máximo y él está allí sentado. Cuando arranca, ya es para mirar a otro lado. No hay nada que hacer. Y ya cuando te sientas, él se marcha. Es increíble.

2025-03-03T10:41:36+01:00
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