El Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria ha puesto fin a su semana de movilizaciones con una gran manifestación en Bilbao en la que han advertido que seguirán con la "lucha" hasta que, entre otras cuestiones, se garanticen pensiones mínimas de 1.080 euros, cuestión en la que también han interpelado a los Gobiernos de Euskadi y Navarra.
Los pensionistas han desarrollado hasta ayer viernes, entre otras iniciativas, un encierro-ayuno en un local de Bilbao para reclamar pensiones "públicas, dignas, justas, suficientes y de 1.080 euros". El colectivo, que se moviliza todos los lunes desde el 15 de enero de 2018 frente al Ayuntamiento de Bilbao así como en diversos municipios vascos, mantiene una tabla reivindicativa que incluye, entre otras cuestiones, pensiones "dignas".
En la movilización de este sábado, tras una pancarta en la que se podía leer el lema 'Recortes de pensiones no-1.080 pensión mínima, se han proferido gritos en favor de las pensiones públicas, contra la brecha salarial y se ha advertido al lehendakari, Iñigo Urkullu, que los pensionistas siguen "en lucha".
Con el apoyo de pensionistas de toda Euskadi y de diversos puntos del Estado, portavoces del Movimiento han recordado que este sábado también se desarrolla en Pamplona una movilización en defensa de la sanidad pública, "otra de las preocupaciones del colectivo".
"Venimos a mostrar que para nosotros no solo son importantes las pensiones de hoy en día sino que también las del futuro. Por eso entendemos justificable que sindicatos y organismos sociales se sumen", han sostenido al inicio de la manifestación.
La marcha, que ha arrancado pasadas las 12.15 horas desde las inmediaciones de la Plaza Moyúa, ha finalizado frente al Ayuntamiento de la capital vizcaína donde se ha leído un comunicado en el que han resaltado que el Movimiento "sigue vivo y fuerte".
Tras reivindicar que una pensión mínima de 1.080 euros en 14 pagas es "un ingreso básico para que un pensionista pueda acceder a una vida digna en su vejez", han asegurado que ello es también "responsabilidad de los gobiernos e instituciones vascas y navarras".
Asimismo, han censurado que "reforma tras reforma" ven cómo se reducen sus pensiones de tal forma que pese a la subida del 8,5%, un total de 167.943 pensionistas en Euskadi y 51.358 en Navarra cobran menos de 1.080 euros.
Reforma
En esta línea, han asegurado que el recientemente aprobado decreto ley de reforma de las pensiones sigue sin garantizar una pensión mínima de 1.080 euros, algo que "tampoco hacen los Gobiernos vasco y navarro".
"A pesar de los aspectos positivos que contiene, el decreto ley es parte de un proceso de reformas que está recortando pensiones y derechos a los pensionistas", han alertado, al tiempo que han defendido que reformas como la de 2011 deberían haber sido derogadas.
A su juicio, "ésta no es la reforma que desde hace más de cinco años" vienen reclamando en las calles y han subrayado que seguirán con la "lucha" hasta que, entre otras cuestiones, los Gobiernos de Euskadi y Navarra complementen las pensiones hasta los 1.080 euros.
Derogar los recortes de las reformas de pensiones, recuperar la pérdida de poder adquisitivo de salarios y pensiones restableciendo la paga compensatoria de las pensiones, así como aplicar medidas para erradicar la brecha de género o derogar los coeficientes reductores de la jubilación anticipada con 40 años cotizados son también elementos de su tabla reivindicativa.