Mitsotakis rechaza tratar de formar gobierno y devuelve el encargo a la presidenta

Pocas horas después de recibir este lunes el encargo para formar un nuevo Gobierno griego, el primer ministro, el conservador Kyriakos Mitsotakis, triunfador de las legislativas del domingo, ha devuelto incumplido el mandato a la presidenta del país, Katerina Sakelaropulu.

De esta manera, el jefe del gobernante partido Nueva Democracia (ND) ha rechazado intentar pactar con alguno de sus rivales, a la espera de que éstos tampoco logren formar un Ejecutivo con mayoría parlamentaria y con ello se haga necesaria la convocatoria de nuevos comicios.

Dado el sistema proporcional para repartir los 300 escaños del Parlamento que se aplica al resultado, ninguno de los partidos ha conseguido la mayoría absoluta para gobernar en solitario.

Pero si se repiten las elecciones, se introducirá un premio de hasta 50 escaños al partido más votado, lo que permitiría a ND obtener la deseada mayoría de 151 de los 300 escaños del Parlamento.

Mitsotakis ya había informado a los líderes de los partido políticos que devolvería el encargo esta tarde y que el Gobierno "sugerirá" a la presidenta la "aceleración" de la disolución del nuevo Parlamento, de forma que la nueva cita con las urnas pueda ser convocada el 25 de junio, informó la oficina del primer ministro.

De acuerdo con la ley, Sakelaropulu entregará mañana el encargo de formar gobierno al exprimer ministro izquierdista Alexis Tsipras, líder de la opositora Syriza, que con un 20% fue la segunda formación más votada el domingo.

Según los medios locales, se espera que también Tsipras devuelva el mismo día el mandato, ya que los tres partidos de izquierda en la oposición no reúnen juntos los escaños necesarios para hacerse con la mayoría absoluta, tras lo cual le tocaría el turno a Nikos Andrulakis, jefe de los socialistas, que tampoco tiene posibilidades de lograr el objetivo.

La presidenta puede finalmente hacer un último intento convocando a los líderes de todos los partidos políticos u ordenar de inmediato la disolución del Parlamento, convocar nuevas elecciones y nombrar un Ejecutivo interino que conduzca al país a los comicios.