El rey de Marruecos Mohamed VI, país que asume actualmente la presidencia del Consejo de la Liga Árabe, convocó este domingo una reunión "urgente" del organismo esta semana para coordinar tras el deterioro de la situación en Oriente Próximo tras el ataque perpetrado este sábado desde Gaza por el grupo islamista Hamás contra Israel.
El monarca marroquí convocó una reunión de los ministros de Exteriores árabes para "concertar y coordinar tras el deterioro de la situación en Gaza y el desencadenamiento de acciones militares contra los civiles y para encontrar medios para frenar esta escalada grave", se lee en un comunicado del Ministerio de Exteriores marroquí.
La misma fuente añade que hay "intensas discusiones" actualmente para celebrar esta reunión esta semana en la sede de la Liga Árabe en El Cairo.
El Ejército israelí declaró ayer sábado el estado de guerra tras un potente ataque combinado de Hamás desde Gaza, con el lanzamiento de cohetes y la infiltración de milicianos palestinos a territorio israelí.
Al menos 300 personas han muerto en Israel desde que Hamás atacara por sorpresa con cohetes e incursiones por tierra al Estado judío, que respondió con una fuerte ofensiva por aire que deja también más de tres centenares de muertos en la Franja de Gaza, según informes médicos de este domingo.
La ANP había solicitado una reunión
El representante permanente de Palestina ante la Liga Árabe, Muhannad al Aklouk, ha pedido este domingo a la entidad panárabe celebrar una reunión extraordinaria lo "antes posible" a nivel de ministros de Exteriores de los países miembros para abordar la guerra entre el movimiento islamista Hamás e Israel.
El representante dijo hoy ante la Liga Árabe, que tiene sede en El Cairo, que celebración de esta reunión deberá tener como fin abordar "la acción política a nivel árabe e internacional para frenar la agresión israelí y para que rindan cuentas quienes la cometieron", así como proporcionar "protección internacional al pueblo palestino". Indicó que la "continua y brutal agresión israelí" contra Palestina ha causado "una escalada sin precedentes en la Franja de Gaza".