Cientos de personas respondieron el domingo al llamamiento de la Fundación Esclerosis Múltiple Euskadi a participar en la iniciativa solidaria del Mójate-Busti Zaitez en playas y piscinas vascas, en solidaridad con las personas que sufren esta enfermedad, según los datos aportados por los organizadores.
Tras dos años en las que la cita se ha adaptado a las restricciones por la pandemia de coronavirus, la Fundación Esclerosis Múltiple Euskadi celebró el 25º aniversario del Mójate-Busti Zaitez, una iniciativa que ha llegado a más de 80 municipios con la colaboración de unas 300 personas voluntarias.
El tradicional chapuzón solidario busca dar visibilidad a una enfermedad que, en función de los datos aportados por la Fundación, afecta a 2.700 personas en Euskadi y 56.000 en todo el Estado y tiene especial prevalencia en las mujeres.
Al acto central de la campaña, que tuvo lugar, como es habitual, en la playa vizcaina de Ereaga en Getxo, acudieron autoridades y representantes del ámbito social, cultural o empresarial, entre otros. Así, decenas de personas afectadas por la esclerosis múltiple participaron o siguieron de cerca la actuación del grupo Zirkus Zirku, que amenizó el acto festivo.
Entre los asistentes se encontraba la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, el diputado de Acción Social de Bizkaia, Sergio Murillo, y el equipo de neurología de los hospitales de Cruces y Basurto que acompañan a las personas con esclerosis múltiple “todo el año y también en esta fecha solidaria”.
Además, se han dado el chapuzón solidario el actor Asier Hormaza y las actrices Maribel Salas, Gemma Martínez y Sol Maguna, y el cocinero Fernando Canales. El presidente de la Fundación Esclerosis Múltiple Euskadi, Javier Ormazabal, agradeció a los participantes su presencia porque “amplifica” un evento en el que cada año se pone de manifiesto “la importancia del trabajo diario” a favor de las personas con esta enfermedad.
Por su parte, Joana Castresana, con esclerosis múltiple desde hace 17 años, lamentaba que las personas con esta enfermedad todavía tienen que seguir “explicando qué les pasa” y ha reivindicado el trabajo de las asociaciones para mejorar la calidad de vida de los afectados “tratando de ofrecer los mejores servicios de rehabilitación”.