Monedas al aire

El pasado Mundial nos trajo finales de partido, muy trascendentes, resueltos mediante el lanzamiento de tiros desde el punto de penal. Asistiendo a ellos recordaba una doble pregunta, no del todo inocente, que suelo formular a nuestros jóvenes aspirantes: ¿Cuántos sorteos con moneda realiza el árbitro en los partidos que se resuelven mediante tiros desde el punto de penal? ¿En cuántos de ellos participan los capitanes? Es bastante habitual que contesten que tres las dos veces o que cuatro en ambos casos. Unos y otros se equivocan.

El primer sorteo pertenece al protocolo pre partido y es seguramente el último momento amable, ciertos árbitros aprovechan para hacer a los capitanes algunas recomendaciones finales, tengo para mí que estos llevan la cabeza tan repleta que las advertencias no les llegan ni para salir del círculo central. El ganador del sorteo elige campo o saque y al perdedor le toca lo que quede.

Tradicionalmente la elección era entre cara o cruz, las monedas actuales ya no son tan simples y a menudo el sorteo se realiza con otras monedas conmemorativas, como anécdota contaré que en la final del Mundial de Rusia la moneda representaba por una cara unos monumentos representativos rusos y por la otra a la multinacional patrocinadora del evento, el bueno del gran árbitro argentino Néstor Pitana les preguntó a Luka Modric y Hugo Llorís: “¿Rusia o Coca-cola?”. La pregunta da para iniciar un libro, gordo como el de Petete, sobre la Guerra Fría y la política de bloques.

El segundo sorteo se realiza, antes de la prórroga con idénticas normas que el inicial, nada relevante hay en ello.

Una vez acabada la prórroga toca decidir en qué área tendrán lugar los lanzamientos y en este sorteo no intervienen los capitanes que se limitan a ser testigos mudos. El árbitro les indica que lado de la moneda corresponde a cada portería y la lanza. Esto es así salvo que razones de seguridad (mal comportamiento de los espectadores de una zona) o que una de las áreas esté impracticable, obliguen al árbitro a decidir sin sorteo.

El último tema a solventar es qué equipo inicia los lanzamientos y la estadística ha hecho que esto no sea cuestión baladí, el equipo que los inicia gana en un sesenta por ciento de las veces con lo que los capitanes tienen resuelta la decisión cuando les toca elegir.

Así que queda claro que la respuesta correcta de nuestro aspirante debería ser cuatro y tres. Cuatro sorteos y tres participaciones de los capitanes.

Estimada lectora o lector si he conseguido entretenerte un rato me doy por muy satisfecho, si además has aprendido algo esto ya será para nota. En cualquier caso te deseo que en este año recién nacido tus alegrías le ganen por goleada a los sinsabores. Que de todo habrá.

El autor es Responsable de Formación del Comité Navarro de Árbitros de Fútbol