Cuando estamos angustiados, nerviosos, deprimidos o aburridos hacemos varias cosas como fumar, escuchar música, hacer deporte o comer. Pero lo cierto es que hoy en día, con más frecuencia, nos mordemos las uñas porque es lo que solemos tener a nuestro alcance. Esta actividad se llama onicofagia y, según la Sociedad Española de Medicina Interna, lo tienen el 30% de los niños entre 7 y 10 años, y el 45% de los adolescentes.
Mujer mordiéndose las uñas.
La verdad es que es un mal hábito que no podemos evitar, pero cuando realizamos esta acción estamos perjudicando mucho nuestra salud porque, ante todo, afecta a la forma de la uña porque se deforma y, como consecuencia, el color de esta cambia a una tonalidad oscura que puede contraer infecciones por hongos o por bacterias.
También nos puede dar dolor de estómago al tragarnos las cutículas de la uña y provocan bacterias en las encías y aftas por la transmisión de gérmenes. Sin embargo, para que esto no ocurra, el graduado en Psicología por la Universitat Autónoma de Barcelona, Marc Rodríguez recomienda algunos trucos para evitar morderse las uñas. Por supuesto que depende de cada persona, pero en la mayoría de los casos, Rodríguez recomienda seguir las siguientes sugerencias.
Aloe vera
Un producto más natural que el esmalte cuyo sabor es desagradable, pero ideal para evitar morderse las uñas. Para usar este método, hay que poner en la nevera durante una noche la parte gelatinosa de una hoja de aloe vera y, cuando comience a tener un color rojizo, podemos aplicarlo sobre nuestras uñas.
Practicar deporte
En situaciones de estrés o ansiedad podemos caminar o hacer yoga, esto ayudará a que nos sintamos más tranquilos y relajados. Aunque sean diez minutos, la meditación puede aliviar mucho nuestra mente para que no tengamos el deseo de mordernos las uñas.
Actividad de concentración
También podemos buscar una actividad que requiera concentración como el sudoku, sopa de letras o la papiroflexia.
Ejercicios de autocontrol
El especialista recomienda hacer dos ejercicios de autocontrol. El primero consiste en acercar un dedo hacia la boca y detenerse a cinco centímetros de los labios. Aconseja repetir varias veces esta acción disminuyendo cada vez más la distancia. En cambio, la segunda opción es introducir una uña entre los dientes sin llegar a morder, hay que mantenerla ahí un tiempo. También señala que hay que hacer esta actividad cinco minutos al día.
Pelota antiestrés
Este método es eficaz porque están diseñadas para las personas que sufren de tensión, ansiedad y estrés.
Son muchas las acciones que podemos hacer para no mordernos las uñas, pero la verdad es que cuesta evitar no hacerlo, sobre todo en momento de estrés o ansiedad. En varias ocasiones envidiamos a la gente que las tiene bien cuidadas, hidratadas o pintadas. Pero con un pequeño esfuerzo y voluntad, podemos tenerlas igual.