Las autoridades rusas han instado este jueves a Reino Unido a probar en el propio territorio británico la munición de uranio empobrecido que prevé suministrar a Ucrania y que Londres defiende no tiene un impacto real sobre la vida de las personas ni el medio ambiente.
"Repito una vez más, si esta amenaza o intención, no sé cómo la califican, se hiciera realidad y si se utilizan (municiones de uranio empobrecido), como por ejemplo en Siria, tanto el agua como el suelo estarán contaminados", ha manifestado la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, Maria Zajarova.
Para la funcionaria rusa, el uso de este tipo de municiones "envenenará (...) durante décadas" a quienes vivan en el territorio donde se usen, por lo que ha invitado a Londres a demostrar que, efectivamente, no tienen un impacto real sobre la vida de las personas.
"Londres, al menos, podría practicar en sus islas qué tipo de 'arma estándar' siempre ha usado. Tienen la oportunidad de realizar tales experimentos allí, probarlo, sentir todo el espectro de consecuencias mortales", ha aseverado Zajarova, según recoge la agencia rusa de noticias TASS.
Las autoridades británicas informaron el martes de que harán entrega a Ucrania de munición fabricada con uranio empobrecido en una decisión que persiguen aumentar el apoyo a Kiev a medida que lucha contra las fuerzas rusas en el marco de la invasión, desatada hace ya más de un año.
Moscú, por su parte, denunció entonces el suministro de lo que consideran es armamento nuclear y ha advertido a Reino Unido de que el suministro de este tipo de capacidades supondría elevar el conflicto "a un nuevo nivel". Londres acusó por su parte a Moscú de "desinformar deliberadamente" sobre el asunto y defendió que la munición no era perjudicial para la población.