Los Mossos d'Esquadra, en colaboración con la Etzaintza, desmantelaron hace un mes en Mont-Roig del Camp (Tarragona) un gran laboratorio de droga sintética, el mayor detectado en Catalunya, y se incautaron sustancias por valor de 4,3 millones de euros en el mercado negro.
Los dos cuerpos policiales, que han dado a conocer la investigación este viernes desde la comisaría de los Mossos de Les Corts de Barcelona, han informado de que hay de momento cuatro detenidos, uno de los cuales es el "cocinero" de la droga que producía él solo en grandes cantidades.
También fueron detenidos la pareja del "cocinero", ambos vivían en la casa donde se fabricaba la droga, así como, días antes, fue arrestada una tercera persona a quien la policía interceptó 131,638 kilos de pasta de sulfato de anfetamina en un vehículo, y una cuarta que había adquirido y llevaba encima 1.152 pastillas de cocaína rosa.
El jefe del Área de Investigación Criminal de la Región Policial del Camp de Tarragona, el inspector Francesc Moragas, ha explicado que al "cocinero" de la droga no se le conoce "formación específica" sobre manipulación de estas sustancias, y creen que aprendió de forma autodidacta.
Moragas ha destacado que se trata de una persona "con un talento y una capacidad innata", puesto que es muy difícil manipular todos los líquidos que han encontrado "y que no te exploten en la cara".
Por su parte, el jefe del grupo de sustancias estupefacientes de la Comisaría de Bilbao de la Ertzaintza, el suboficial Hermelo Molero, ha asegurado que podía "tirarse 20-24 horas en la elaboración del producto", puesto que se trata de uno de los laboratorios de drogas de diseño más grandes vistos en el Estado español.
Las drogas sintéticas se fabricaban en el garaje del domicilio ubicado en Mont-Roig, donde se había instalado un laboratorio altamente tecnificado que producía grandes cantidades de sustancias, que no se vendían al detalle, sino a traficantes.
La investigación comenzó el pasado mes de noviembre cuando la Ertzaintza, a través de varias investigaciones, descubrió la posible existencia de un laboratorio clandestino de drogas en Tarragona, que los Mossos d'Esquadra piensan que podría llevar operativo desde 2017.
La investigación se puso en marcha y, a través del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado, se detectó que personas vinculadas con la investigación estaban adquiriendo tanto "precursores de drogas como explosivos".
Entre esos precursores, se estaba comprando nitrometrano, utilizado para la fabricación de explosivos, con un nivel de pureza de alrededor del 99-100 %, cuando lo habitual es que se consiga con una pureza mucho menor, de un 10-15 %.
En el domicilio, además del laboratorio, la policía encontró varios espacios dedicados a otras actividades como la soldadura, la modificación de armas y una zona donde presuntamente se podían fabricar explosivos o artefactos pirotécnicos o incendiarios.
El suboficial Hermelo Molero también ha explicado que "en Cataluña no se conocía esta droga en estas cantidades", que en Euskadi tiene valor de 1.000-1.200 euros el kilo una vez el material está en circulación en la calle y cuyo precio se incrementa fuera de ese territorio.
En el contexto del operativo, los Mossos realizaron una segunda entrada en Reus (Tarragona), en relación con el hombre detenido por llevar sulfato de anfetamina en el vehículo, donde encontraron más material.
Entre las sustancias que se han intervenido en el marco de esta investigación, se han decomisado 156,5 kilos de pasta de 'speed' sin cortar con un valor de 1,68 millones de euros y que, una vez cortada, podía aumentar en 2 o 3 veces la sustancia.
También, se han decomisado 108 kilos de 'speed' para comercializar por un valor de 1,35 millones, así como 21,9 kilos de '2CB', 'tusi' o cocaína rosa; 10 kg de ketamina; 2,7 de MDMA, 5 kg de cogollos de marihuana, diez armas de fuego y munición -tanto real como de fogeo- y 42.000 euros en efectivo.
En la presentación de la investigación que ha dirigido el Juzgado de Instrucción 3 de Reus también han participado el Jefe del Centro de Información de la Comisaría de Bilbao, el subcomisario Asier Jauregi, y el sargento Xavier Tenorio, jefe de la Unidad Territorial de Investigación de los Mossos d'Esquadra.